Los hechos ocurrieron sobre las 2.00 horas del domingo, cuando los agentes fueron requeridos por una pelea a la entrada de un local entre dos porteros y tres clientes por que les habían negado entrar.
Los dos porteros, que posteriormente quedaron detenidos por un presunto delito de lesiones, estaban habilitados y poseían el curso que permite desarrollar las funciones de controladores de acceso a una sala de pública concurrencia, aunque en el momento de los hechos no llevaban visible las tarjetas acreditativas.
Los heridos recibieron atención sanitaria del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y, posteriormente, los tres clientes –tres hombres de entre 20 y 40 años–, fueron trasladados al Hospital Clínic de Barcelona, donde fueron atendidos de diversas lesiones.
Uno de ellos necesitó puntos de sutura en la boca y otro, con rotura ósea, quedó ingresado en el centro pendiente de una segunda intervención médica. En el lugar de los hechos también fue atendido uno de los dos porteros posteriormente detenido, como consecuencia de las lesiones sufridas durante la pelea.