Las drogas virales están aquí. Turistas de todas partes llenan los puertos ibicencos con nuevas costumbres y consumos. En este caldo de cultivo perfecto, algunos aprovechan para incentivar el consumo de sustancias no ilegales que puedan crear euforia o risa. Un colocón fácil y rápido, sin mayores consecuencias aparentes más allá del minuto de »felicidad», pero con numerosos casos fatales que los consumidores suelen ignorar.
Es el caso del óxido nitroso. Su llegada a Ibiza llama ahora la atención a la Policía local de los municipios de la isla balear, pero su fama saltaba a Youtube hace tiempo. Se trata de un gas que se consume desde globos, que se comercializan en las zonas de fiesta por un precio que ronda los 5 euros y que da para varias dosis de pocos minutos. La sensación varía, pero en general suele causar una repentina risa y embriaguez.
La droga viral
Se comercializa como «gas de la risa» y a los usuarios de Youtube les encanta. El consumo en fiestas salta a las redes en forma de vídeos de reacciones y risas que suponen la campaña de marketing perfecta . No se trata de una droga que se consuma detrás de la puerta de un baño público. Su banalización como droga no crea una conciencia de peligrosidad alrededor suya. Incluso en el Hormiguero hicieron una demostración en directo del inocente gas de la risa como una prueba más en su sección científica.
En Youtube son varios los vídeos de reacción a la inhalación de este gas, que cogen fuerza viral entre el público joven.
Morir de la risa es posible
En Reino Unido la BBC ya se hacía eco de la gran cantidad de botellas vacías de óxido nitroso en los clubes británicos. Según la Oficina Nacional de Estadísticas británica se registraron entre 2006 y 2012 nueve muertes vinculadas con el consumo del gas de la risa.
Ante este escenario, la ley se muestra aún impotente. La comercialización con fines recreativos es ilegal pero sigue siendo fácil adquirirla con fines profesionales, como la repostería, a un precio barato. Como el tráfico de drogas, se castiga con prisión de 6 meses a tres años.