Aunque el ejercicio es una de las claves de un estilo de vida saludable, si se elige realizarlo en el exterior, la contaminación podría dar lugar a una combinación nada sana. Esto es especialmente complicado en las personas que padecen enfermedades crónicas como asma, diabetes o los trastornos pulmonares.
Desde la Clínica Mayo señalan que incluso sin realizar ejercicio la exposición al aire puede producir problemas de salud. Pero con la combinación de aire contaminación y ejercicio, los potenciales problemas para la salud aumentan.
Los problemas de salud a la contaminación son:
Daños en las vías respiratorias de los pulmones.
Mayor riesgo de desarrollar asma
Empeoramiento del asma existente o de otros trastornos pulmonares
Mayor riesgo de ataques cardíacos e ictus
Mayor riesgo de mortalidad por cáncer de pulmón y de enfermedad cardiovascular
Una cuestión sin aclarar a la que se refieren los científicos es cuánta exposición es un peligro o durante cuanto tiempo tiene la persona que estar expuesta para sufrir estas consecuencias.
Consejos para minimizar los riesgos de la combinación de contaminación y ejercicio:
Planificación del ejercicio físico del ejercicio con cuidado. Evite la actividad física en el exterior o reduzca la intensidad y duración del entrenamiento cuando las alertar de calidad de aire adviertan de los elevados índices de partículas contaminantes.
Evita las áreas de contaminación elevada. Los niveles de contaminación suelen ser altos dentro de los 15 metros cercanos a una carretera. Los ambientes urbanos y las áreas para fumar en el exterior también tiene mayores niveles de contaminación. Si es posible, evita esta clase de áreas cuando realice este ejercicio.
Alternar el ejercicio tanto en el exterior con en el interior
Consulte siempre al médico: si se padece asma, diabetes u otro trastorno, es mejor consultar con el médico cuando es más saludable hacer ejercicio.