El misionero español Manuel García Viejo, ingresado desde esta madrugada en el hospital Carlos III de Madrid, podría ser tratado con suero hiperinmune, elaborado a partir de la sangre de un superviviente del ébola, según han repetido distintos responsables del Ministerio y la Consejería de Sanidad, en las ruedas de prensa ofrecidas este lunes. La sangre procedía de un paciente alemán que sobrevivió al ébola, aunque, debido a que tiene hepatitis B, su sangre quizá no podría ser usada.
Este procedimiento consiste en la trasfusión de plasma de la sangre de un paciente que ha superado la enfermedad. La transfusión es de unos 400 a 500 centímetros cúbicos de suero, pero tiene sus riesgos, ya que puede provocar reacciones alérgicas. Los anticuerpos de la sangre de alguien que ha sufrido la enfermedad sirven para luchar contra el virus, por lo que el paciente que recibe el plasma, la transfusión, recibe una defensa más contra la infección. Según ha explicado el médico Jose Luis del Pozo, este es un tratamiento que ya se usaba durante la peste negra, como ha explicado en Onda Cero. El tratamiento se realiza filtrando la sangre para eliminar globulos blancos, ya que lo que interesa son los anticuerpos, que ayudarán a combatir la enfermedad.
La posibilidad de que García Viejo sea tratado con Zmapp, el denominado «suero milagroso» que se aplicó al sacerdote Miguel Pajares, en agosto, queda descartada, ya que las existencias se encuentran agotadas en todo el mundo, según ha confirmado en rueda de prensa el doctor José Ramón Arribas, jefe de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital La Paz-Carlos III. García Viejo está siendo tratado en estos momentos únicamente con un «tratamiento de soporte» para combatir la deshidratación.
La Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD) informó este martes que el estado de salud del Hno. Manuel García Viejo continúa siendo grave «lo que nos obliga a tener paciencia y cautela en estos momentos tan delicados», ha afirmado el Hno. Julián Sánchez, portavoz de la OHSJD y director de la Fundación Juan Ciudad. El Hno. Manuel García Viejo ha pedido que se mantenga la privacidad sobre su estado de salud.
Desde este lunes se están buscando alternativas, siempre experimentales, ya que «no hay tratamiento médico específico más allá del de soporte y sintomático», recordó este lunes la directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa.
Todavía no existe un tratamiento aprobado oficialmente para el ébola. El uso de algunos medicamentos fue aprobado por la OMS como «ético» ante la situación de emergencia humanitaria, pero muchas de las respuestas ante el virus están todavía en proceso de desarollo. El actual brote, el peor de la historia, ha acelerado el desarrollo de tratamientos para intentar hacer frente a la enfermedad.
Mientras se han agotado las existencias de ZMapp, la medicación que había curado ya a varios (pocos) pacientes, el tratamiento básico para los enfermos de esta enfermedad consiste en mantenerlos hidratados. Se trata a los convalecientes con fluidos intravenosos, antibióticos y tranfusiones de sangre para ayudar a sus sistemas inmunitarios a luchar contra la infección.
Actualmente los tratamientos que se están desarrollando o utilizando, o se han utilizado en el pasado son:
Zmapp, ya agotada
El suero inmunológico experimental contiene 3 anticuerpos monoclonales que atacan las proteínas en la superficie del virus. Lo que busca es detener la fiebre hemorragica que se produce con la infección. Dos ciudadanos estadounidenses, Kent Brantly y Nancy Writebol, fueron curados con este tratamiento. El sacerdote español Miguel Pajares también fue tratado con la medicación, pero no consiguió salvarle.
Esta medicación se ha agotado.
Favipiravir o T-705
En la revista Antiviral Research, investigadores alemanes sugieren la eficacia del tratamiento con el antiviral T-705 o favipiravir -diseñado para gripe- en animales con ébola. Es efectivo contra el virus de la influenza, el virus del Nilo, la fiebre amarilla y otras enfermedades similares. En primeros experimentos, parece que cura el tratamiento cura el ébola en ratones. Japón ha estado utilizando el tratamiento para combatir el ébola en África.
TKM-Ébola
Este tratamiento tiene como objetivo el material genético del virus (RNA). Desarrollado en Canadá por Tekmira Pharmaceuticals, ha sido probado en monos y en voluntarios humanos. Lo que hace este tratamiento es interceptar el material genético del virus, lo cual previene que este cree proteinas que causen la enfermedad.
AVI-7537
Sarepta Therapeutics, empresa estadounidense, ha desarrollado un tratamiento similar al creado por la canadiense. Sarepta ha probado un tratamiento de RNA en monos y humanos sanos, conocido como AVI-7537, pero todavía no en humanos con la enfermedad. Según informaba a principios de agosto, había pedido permiso para usar la inyección. La compañía tiene suficientes dosis para tratar a varias decenas de pacientes, pero podría incrementar las dosis a más de 100 en varios meses.
Suero sanguíneo
El tratamiento ha sido usado para curar a personas en EEUU, como el trabajador humanitario Rick Sacra. La sangre de los supervivientes a la enfermedad está llena de anticuerpos contra el virus mortal, y dado que no hay todavía un medicamento aprobado para combatir el virus, algunas personas han recurrido al mercado negro para obtener la sangre de alguien que no murió por la enfermedad.
Según informa la OMS, Organización Mundial de la Salud, en el brote de 1995 en la República Democrática del Congo, siete de cada diez pacientes sobrevivieron después de ser tratado con el sérum de supervivientes.