Consumir café o té mate a temperaturas muy elevadas y de manera reiterada puede provocar cácer de esófago, basándose en los grados de la bebida y no en las sustancias de la misma, según un estudio publicado este miércoles por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC) de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El jefe de sección del servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Fe de Valencia, asegura que «No hay que alarmarse porque ya se sabía que el tumor de esófago se asociada a quemaduras importantes, las cuales pueden aparecer o empeorar cuando se toman bebidas muy calientes. No obstante, en España la mayoría de las personas beben líquidos que no están tan calientes, como sí se hace en algunas regiones de Asia o Sudamérica».
El análisis lo realizaron un grupo de científicos, formado por 23 expertos, que recorrieron países como China, Turquía y de América Latina donde el café o el té mate se beben muy calientes, a temperaturas que rondan los 65°C, para recoger muestras. Las pruebas sacaron a relucir un aumento del riesgo de cáncer de esófago por la alta temperatura de las bebidas consumidas, más que por las bebidas en sí.
El café no es malo
Además, la OMS, que ya generó el año pasado titulares en todo el mundo al advertir de que la carne procesada puede causar cáncer, ha concluido que no hay pruebas suficientes de que el café para ser clasificado como carcinógeno o no cancerígeno después de revisar más de 1.000 estudios científicos en humanos y animales. El café había sido incluido previamente de café en la categoría 2B de «posibles carcinógenos», junto al cloroformo y el plomo, entre otras muchas otras sustancias. La Asociación Nacional del Café de Estados Unidos ha dado la bienvenida al cambio de clasificación de la IARC como «una gran noticia para los bebedores de café”.
El portavoz de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), Jorge Aparicio, asegura que científicamente se demuestra una asociación, por lo que hay que intentar evitar el consumo de estos alimentos o bebidos en la medida de lo posible, pero no pasa nada por comerlos o beberlos en alguna ocasión».