El responsable de Epidemiología Laboral y Ambiental de la dirección de Salud Pública del Principado, Valentín Rodríguez, ha dado cuenta del estudio realizado y en el que se han comparado los análisis realizados a los trabajadores intoxicados, los de otras empresas subcontratadas, los de la propia Asturiana de Zinc y población general de Avilés, Oviedo y Gijón.
En las conclusiones del mismo se establece que la intoxicación sufrida por medio centenar de empleados de una subcontrata de Azsa «no es un caso de gravedad, desde el punto de vista médico». Se apunta que no ha habido «afectación grave en ningún órgano vital» y que únicamente se notó alguna en los antebrazos, «pero todo casos leves».
Por lo que se refiere a los niveles de intoxicación se establece que los registrados por los trabajadores afectados son muy superiores a los de otros empleados, tanto propios como subcontratados por la empresa. En el caso de empleados de Azsa la media es de 6,13 miligramos por litro en sangre, mientras que en el caso de los trabajadores de otras empresas o la población analizada apenas supera los 5 miligramos por litro de sangre, de media.
Los responsables de la Consejería han insistido en que el seguimiento médico que se hizo de los trabajadores afectados por la intoxicación fue el adecuado y que «el dispositivo fue extraordinario, que ningún afectado laboral ha tenido en España», en palabras del director de Salud Pública, Julio Bruno.
Han insistido en que «el dispositivo (médico) creado se mantendrá el tiempo que sea necesario hasta que se garantice que ninguno de los afectados tiene ningún problema de salud». También han anunciado que se realizará una campaña en que se informe a la población de la exposición de mercurio.