Sólo un 38% (-2 puntos respecto al semestre anterior) de los vascos piensa que los presos etarras que se arrepientan y expresen su decisión de abandonar definitivamente las armas deberían beneficiarse de medidas de reinserción social.
Por su parte, casi uno de cada tres (32% -2 puntos) opinan que éstas sólo podrían aplicarse a a aquellos que no tengan delitos de sangre, mientras que casi uno de cada cuatro (23%) se mantienen firmes en la idea de que unos y otros terroristas deben cumplir íntegramente sus penas. El porcentaje de estos últimos crece 3 puntos respecto al Euskobarómetro anterior.
Si bien los nacionalistas mantienen una apuesta mayoritaria por el perdón incondicional de los presos etarras (53%), los no nacionalistas continúan muy divididos ante este espinoso asunto: los que se inclinan por pasar página son un 33% frente al 34% que se decanta por el cumplimento íntegro de las penas.
Como no podía ser de otra manera, el 70% de los electores de EH Bildu se manifiesta con claridad por un perdón sin condiciones.
La mitad quiere una negociación ETA-Gobierno sin condiciones
Aunque se mantiene el apoyo casi unánime a una eventual negociación entre Moncloa y la banda terrorista (83%) continúa retrocediendio (-12 puntos en el último año) la preferencia por una negociación condicionada a que ETA se disuelva (33%) y avanzan hasta la mayoría (50%) quienes apuestan por una negociación incondicional.
Curiosamente es algo que comparte tanto nacionalistas (89%) como no nacionalistas (79%), aunque se diferencian por la posición incondicional de los primeros (69%) y la condicionada por los segundos (43%).