Asímismo, han anunciado que las movilizaciones «no están abandonadas sino suspendidas hasta ver cuáles son las ofertas que se proponen» al colectivo y que si los «gestos» no se concretan en «hechos», retomarán «la situación previa».
Han advertido que el próximo día 24 de julio la Administración Penitenciaria deberá contestar a las cuestiones planteadas y dar una solución «más objetiva» a sus demandas.
Asímismo, han señalado tres «hitos» que consideran de «urgencia»: los cambios en la estructura de mando al frente de la Secretaría General, la apertura al conjunto de la sociedad y la dignificación de la función que los empleados de prisiones.