La apoderada de ERC en las elecciones europeas y municipales de este domingo se ha quitado la camiseta, le ha dado la vuelta y se la ha vuelto a poner, de manera que no se pudiera leer lo que ponía: «Mire señor, me la saco y ya no hay ningún delito. Sin ningún problema».
Lo ha hecho a instancias de un apoderado de Vox, que le ha advertido de que llevar esa camiseta «es un delito electoral».
Ha pasado antes de que llegara Valls a votar, y los periodistas le han hecho saber que una apoderada de ERC llevaba la camiseta de »Libertad presos políticos» y que el apoderado de Vox le ha hecho quitársela o la denunciaban a la Junta Electoral.
Valls ha respondido: «Yo no comento lo que pasa aquí. Hay una mesa, yo soy candidato, y muy orgulloso de votar hoy como candidato, como barcelonés. Este domingo es un día de fiesta democrática».