La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha pedido a la Generalitat que plantee al Estado las demandas que tenga durante la Conferencia de Presidentes del 17 de enero, aunque ha advertido de que la única que bajo ningún concepto escuchará es la del referéndum de independencia en Cataluña.
Lo ha declarado tras reunirse dos horas y media en Barcelona con el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, y ha dicho que muchas demandas de la Generalitat están «ligadas» a lo que se abordará en la Conferencia de Presidentes.
También ha hecho referencia a lo que ha dicho a Junqueras sobre las 46 demandas que el presidente Mariano Rajoy recibió del presidente Carles Puigdemont: «Le he transmitido que ese documento está ligado al proceso que vamos a abrir en la Conferencia de Presidentes, y le dejo a la Generalitat la manera con la que lo va a enfocar si el presidente –Puigdemont– decide asistir».
Santamaría ha animado a la Generalitat a participar en la Conferencia de Presidente porque, según ella, el Gobierno le ha dado un nuevo formato para convertirlo en un «órgano decisorio» en el que tengan voz el conjunto de las autonomías.
Así, el Gobierno central considera que en este foro la Generalitat puede llevar demandas como el impulso de un bono energético social, educación u otros temas, como la participación de las autonomías en la UE.
La vicepresidenta lanza la petición de que Puigdemont asista a la Conferencia el mismo día en que la portavoz del Govern, Neus Munté, se ha reafirmado en que la Generalitat no asistirá porque quiere un trato «bilateral».
Unidad de mercado
Santamaría también ha ofrecido a la Generalitat llegar a un acuerdo sobre la interpretación de la Ley de Unidad de Mercado para que deje de ser un contencioso judicial abierto, y ha recordado que el Gobierno central ya ha llegado a un acuerdo en este ámbito con Galicia y el País Vasco.
Además, ha animado a la Generalitat a participar en la redacción del Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 y también ha visto margen de negociación sobre un «paquete de infraestructuras» que el Govern demanda y que el Estado ve con buenos ojos impulsar.
«El Gobierno de la Nación tiene muchos proyectos para Cataluña y creemos que podemos ir de la mano en muchos de ellos», ha sentenciado la vicepresidenta.
Reunión «larga y cordial»
Santamaría ha explicado que ha sido una reunión larga «con un ambiente constructivo y sincero y con un tono cordial» dividida en dos partes diferenciadas: la primera sobre el referéndum que la Generalitat propone y el Gobierno rechaza, y la segunda sobre el resto de temas sobre los que considera que sí se pueden abordar.
Sobre el referéndum, ha repetido lo mismo que ha declarado antes de participar en la reunión: «No podemos negociar aquello de lo que no podemos disponer», que es que la soberanía es del conjunto de los españoles y no del Gobierno ni de una parte del territorio.
Así, el Ejecutivo central asegura que puede abordar 45 de los 46 puntos que el presidente Puigdemont solicitó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una reunión en abril de 2016, y que el punto que excluye es el del referéndum que la Generalitat quiere hacer en septiembre de 2017.
Junqueras convencido del referéndum
El vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha afirmado que el Gobierno central se va de este encuentro «convencido de que habrá referéndum en Cataluña» .
En declaraciones tras la reunión, que ha calificado de larga, intensa y en tono cordial, ha insistido en que el Ejecutivo catalán no renunciará al referéndum sobre la independencia de Cataluña y que lo va a celebrar porque es su voluntad y su compromiso, que no condicionará a «tener permiso» del Gobierno central.
Ha explicado a Santamaría que la Generalitat tiene voluntad de celebrar un referéndum acordado con el Estado, si bien ella ha insistido en que el Gobierno central no quiere oír hablar de referéndum, por lo que Junqueras ha dicho: «Haremos todo lo necesario para que haya referéndum y ellos utilizarán las herramientas que crean necesarias para no facilitar el trabajo en este sentido».
Ha incidido en que el referéndum ha sido una parte muy relevante de la reunión y que el Govern cumplirá su mandato, continuando adelante y haciendo su trabajo, aunque el Gobierno central no quiera «ni hablar de esta posibilidad».
Ha añadido que también han hablado de trámites parlamentarios, «algunas cosas vinculadas a la pobreza energética y poca cosa más».
Respecto al Decreto ley sobre medidas de pobreza energética que el Gobierno central quiere tratar con los grupos parlamentarios en el Congreso para sacarlo adelante a finales de mes, el conseller ha recordado: «Es una cuestión que en todo caso nosotros ya teníamos resuelta y fueron ellos que la recurrieron al Tribunal Constitucional«.
Conferencia de presidentes
En lo referente a la presencia o ausencia de representantes catalanes en la conferencia de presidentes de la próxima semana y el aviso de Santamaría de que en ese encuentro se van a decidir cuestiones de interés general de diversos ámbitos, Junqueras ha afirmado que la decisión final la «resolverá quien le corresponda«.
En cualquier caso, ha considerado: «Si hay alguna propuesta, entiendo que nos la harán llegar al margen de cual sea el ámbito concreto en el cual se produzca».
Preocupaciones de Junqueras
Junqueras también ha aprovechado el encuentro con Sáenz de Santamaría para hacerle llegar que «hay una preocupación generalizada de la gestión que está haciendo el Gobierno español del fondo de reserva de la Seguridad Social porque está poniendo en riesgo el futuro de las pensiones de los ciudadanos».
También ha recelado de la gestión de la deuda pública española porque el Gobierno central ha anunciado que este 2017 emitirá deuda por valor de más de 550 millones de euros diarios: «Hemos insistido sobre las complejidades que esto conlleva» ante un horizonte cada vez más cercano de incremento de los tipos de interés y por el elevado peso de la deuda a corto plazo.