Según el presidente cesado, la investidura no se podría hacer ni en Bruselas ni en la cárcel, sino solo en la cámara: «Ni en prisión puede ser uno investido presidente. Debe estar en libertad como mínimo el tiempo para poder ser investido y ejercer la responsabilidad del cargo. Esto, para mí, pesa más que el peso de las esposas y los barrotes».
Por eso, ha preguntado al «tripartito del 155» –en referencia a PP, Cs y PSOE– si respetarán un resultado electoral que apueste por una mayoría soberanista, y, si es así, será posible que el Parlament invista un presidente y que éste elija al Govern que legítimamente cree que debe configurar, ha dicho en rueda de prensa.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)