El anuncio de Susana Díaz de concurrir a las primarias del PSOE sitúa al partido con tres candidatos oficiales para el puesto de secretario general. No se descarta que se sume un cuarto nombre. El diputado aragonés Ignacio Urquizu se lo estaría pensando, según algunas informaciones. El próximo 1 de abril, el partido reunirá a su Comité Federal para fijar el calendario de las primarias. Previsiblemente serán en mayo. El Congreso Federal tendrá lugar los días 17 y 18 de junio. Ésta es la ficha de los tres aspirantes, con sus puntos a favor y en contra:
Pedro Sánchez, el favorito de las bases
– 45 años. Madrid. Casado. Padre de dos hijas.
– Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por el Real Centro Universitario María Cristina (UCM). Doctor en Economía y Empresa por la Universidad Camilo José Cela.
– Cargos públicos más importantes: Ex Secretario General del PSOE. Ganó las primarias en 2014 a Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias. Concejal del Ayuntamiento de Madrid y diputado autonómico en la Comunidad de Madrid.
– Experiencia laboral fuera de la política: profesor universitario y consultor.
A favor:
A priori, es el preferido de los militantes del PSOE, no así de los votantes socialistas. Su campaña está siendo un éxito de convocatoria que está sorprendiendo en Ferraz y. El llenazo de su acto en Cádiz ha sido percibido como un golpe sobre la mesa en Andalucía, feudo de Susana Díaz. Sus rivales están preocupados por el poder de movilización de Sánchez. Tiene encarrilado el apoyo de las federaciones de Comunidad Valenciana, Extremadura, Castilla y León y Cataluña. Ésta última se antoja fundamental, ya que ha aumentado su censo de 9.000 a 14.000 votos. Se presenta como una opción de oposición real contra Mariano Rajoy ahondando con su campaña en la percepción general de que Susana Díaz es más favorable a los pactos con el presidente del Gobierno. Asimismo, se presenta como el héroe capaz de enfrentarse al aparato del partido. Ha sumado apoyos como los de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo.
En contra:
Ha sido candidato a presidente del Gobierno en dos ocasiones y ha cosechado los peores resultados de la historia del PSOE. Su perfil está radicalizado, más cerca de Podemos que del PSOE de sus predecesores. De hecho, tiene en contra a las figuras históricas del partido, como Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero ý Alfredo Pérez Rubalcaba. Es percibido por algunos sectores como el candidato del rencor, primando intereses personales sobre los partidistas. Está enfrentado frontalmente a la gestora del partido. La reciente acusación de la gestora a Sánchez de financiación ilegal es el último enfrentamiento con el aparato. Se extiende el miedo de que su victoria puede partir el partido en dos. Algunas federaciones no le perdonan su postura favorable a un pacto de gobierno con Podemos y al referéndum secesionista catalán.
Susana Díaz, el establishment socialista
– 42 años. Sevilla. Casada. Madre de un hijo.
– Licenciada en Derecho por la Universidad de Sevilla. Tardó 10 años en hacer la carrera.
– Cargos públicos más importantes: Presidenta de Andalucía (desde 2013) y secretaria general del PSOE andaluz. Diputada autonómica y senadora.
– Experiencia laboral fuera de la política: venta de cosméticos y clases particulares.
A favor:
Actualmente, controla el partido a través de una gestora. Es la preferida por el aparato y cuenta con el apoyo público de Zapatero, González y Rubalcaba. Éste último acompañó a Díaz en el acto oficioso de campaña en Alcalá de los Gazules. Se la percibe como la candidata que mantendría el carácter nacional del partido, anteponiendo los intereses del conjunto del PSOE a los de algunos territorios. Favorece la idea de estabilidad. Tendría el respaldo de las federaciones de Andalucía (la más numerosa), Castilla La Mancha, Asturias, La Rioja y Murcia. Está actuando con éxito en Cataluña, Castilla y León y Galicia para robarle apoyos a Sánchez. Su campaña aún no ha empezado oficialmente, por lo que de ahora en adelante podrá exhibir más apoyos y adhesiones.
En contra:
Su principal punto en contra es que se la ha etiquetado como la candidata que prefiere la derecha (como en su día fue la de José Bono) y que garantizaría la estabilidad del gobierno de Rajoy para acabar la legislatura. Sus maniobras en la sombra para destronar a Sánchez como secretario general para colocar al frente el partido a una gestora la han enfrentado con parte de sus compañeros. Podemos no facilitaría su investidura tras unas elecciones. La gestión de Andalucía (aprobada por menos de la mitad de los votantes socialistas) tampoco la avala: está a la cabeza en paro, fracaso escolar, presión fiscal y precariedad laboral. Los escándalos de los ERE y los cursos de formación la desautorizan en cierta manera para acusar al PP por sus escándalos de corrupción.
Patxi López, la tercera vía
– 57 años. Baracaldo. Casado.
– Estudió Ingeniería Industrial en la Universidad del País Vasco, pero no terminó la carrera.
– Cargos públicos más importantes: presidente del Congreso, lehendakari, presidente del PSE.
– Sin experiencia laboral fuera de la política.
A favor:
Es la tercera vía en un partido resquebrajado en dos. Se presenta como el candidato capaz de coser las heridas. Su candidatura fue una sorpresa. Cuenta con la simpatía de algunos dirigentes que ven en él una solución intermedia entre Susana Díaz (más cercana al PP) y Pedro Sánchez (más cercano a Podemos). Ha sido capaz de mantener su constante crítica a Mariano Rajoy mostrándose contrario a facilitarle el Gobierno, al tiempo que se presenta como un hombre negociador y dialogante gracias al recuerdo de que fue capaz de pactar con los populares para llegar a ser lehendakari. Euskadi parece su principal feudo, pero no está garantizado.
En contra:
Que nadie le ve como una opción con posibilidades de victoria, lo que le hará perder votos, que escogerán de forma más útil. Su campaña está estancada. Entre los “sanchistas” le ven como un traidor, no le perdonan que diera el paso delante de presentarse como candidato cuando fue presidente del Congreso gracias al último secretario general. Entre sus seguidores hay “arrepentidos” que se acercan ahora a Sánchez. Otros en Ferraz le llaman “San Patxi” porque aseguran que es un candidato que se presenta para dividir a los seguidores de Sánchez y facilitar así la victoria de Susana Díaz.