El PSOE ha destacado hoy que el rey Felipe VI fue «muy tajante y determinante» con su mensaje contra la corrupción en su primer discurso de Navidad y con la «importancia» que manifestó en garantizar el estado de bienestar como elemento de cohesión social.
En rueda de prensa, el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Antonio Hernando, ha valorado «la correcta descripción que hizo el rey de los problemas que afectan a España que son, ha citado, la político-institucional, la económico-social y la territorial.
Los socialistas consideran «especialmente significativo» que Don Felipe resaltara la corrupción como el principal problema de España.
«Fue muy tajante y determinante», ha dicho Hernando, que ha evitado referirse a la infanta Cristina al explicar que el rey utilizó frases contra la corrupción «especialmente aceradas».
Ha resaltado también la defensa que hizo el rey del mantenimiento y garantía del estado de bienestar «en tiempos de recortes». «Es importante que el rey manifieste esa garantía», ha precisado.
Para el PSOE, el discurso del rey «refleja el estado de animo» de muchos ciudadanos al hablar de «inquietud e indignación» y sobre todo de «ese tiempo nuevo» que deben protagonizar los españoles de hoy.
Frente a los que aseguran que la crisis es una cuestión del pasado, ha dicho Hernando, «el rey ha destacado lo mal que lo están pasando muchos ciudadanos, con cifras de desempleo inaceptables, parados de larga duración y frustración entre los jóvenes».
«Sabe que mucha gente lo sigue pasando muy mal», ha agregado.
Rivero lamenta la referencia a Catalunya
Por otra parte, el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha considerado que la referencia del Rey a Cataluña en su primer discurso navideño «ha sido oportuna pero insuficiente».
Rivero lamenta en un comunicado que el Rey «limitara su alusión al modelo territorial al caso catalán, cuando lo cierto es que la necesidad de poner al día el marco de convivencia y de relaciones de los distintos territorios con el Reino de España, con la Constitución sobre la mesa, no se limita a Cataluña».
«Cuando aludió al marco de convivencia no debió mencionar solamente a Cataluña, sino también a otros territorios como Canarias, que esperan que, de una vez por todas, se ponga al día la Constitución», ha recalcado el presidente canario.
A juicio de Paulino Rivero, «en su primer discurso como rey, Felipe VI ha hecho bien reconociendo las dificultades, incertidumbres y complejidad del momento económico e institucional».
El presidente canario también ha estimado que el Rey «ha sido valiente al asumir que el descontento y la indignación de los ciudadanos están más que justificadas ante una crisis que en el conjunto del Estado tiene en el desempleo y el incremento de las desigualdades sus expresiones más dolorosas, así como ante determinadas conductas poco o nada ejemplares».
En esa dirección, afirma Rivero, Felipe VI «ha estado acertado al recalcar la conveniencia inaplazable de impulsar la regeneración para reconducir el descrédito institucional».