El PSC ha ratificado por unanimidad el no a Mariano Rajoy en el debate de investidura, con lo que desobedecerá al Comité Federal del PSOE, que este miércoles reúne a su grupo parlamentario para comunicar a los diputados que deben abstenerse en bloque en la segunda votación.
El Consell Nacional del PSC, máximo órgano entre congresos, en una reunión de dos horas en la que han pedido palabra hasta 18 consejeros, ha respaldado por 241 votos a favor y sólo una abstención la posición de la dirección liderada por Miquel Iceta.
El primer secretario ha intervenido en la reunión para defender el no a Rajoy, aun siendo consciente de que generará un «problema» con el PSOE.
La resolución votada por unanimidad expresa el rechazo a Mariano Rajoy por sus políticas económicas y sociales y por ser «en gran medida» responsable de la falta de diálogo de los gobiernos catalán y español.
El texto pide específicamente a los diputados del PSC en el Congreso que «voten negativamente la investidura de Mariano Rajoy en primera y segunda votación», alegando que la Constitución no contempla un «mandato imperativo» a los parlamentarios.
La gestora del PSOE ha asegurado que la decisión del Consell Nacional del PSC de votar no a Mariano Rajoy en las dos votaciones de la investidura supone «una ruptura unilateral en la leal y exitosa unidad de acción» que ambos partidos mantiene desde 1978.
En un comunicado, Ferraz lamenta «profundamente» el paso dado por el máximo órgano de los socialistas catalanes al considerar que va contra el mandato del Comité Federal del PSOE de abstenerse ante Rajoy en la segunda de las votaciones, que previsiblemente será el próximo sábado.
La gestora que preside Javier Fernández pide a los siete diputados del PSC, a los que recuerda que no tienen grupo propio en el Congreso, que deben «obedecer» el mandato del PSOE y votar «conforme a lo acordado de manera democrática y mayoritaria» por el máximo órgano el pasado domingo.
También apela «a la sensatez, a la historia común» entre ambas formaciones y a la tarea común desarrollada durante casi cuatro décadas de colaboración.
«No existe, por tanto, justificación alguna para contravenir el acuerdo adoptado por el Comité Federal», sentencia la gestora ante el desafío planteado por la formación que lidera Miquel Iceta.
Ferraz advierte de que, «en la cultura del PSOE, las decisiones de los órganos del partido han sido defendidas en todo momento por el conjunto de la organización, sean cuales hayan sido».