«Hay quien pretende jugar con las banderas y por tanto con los sentimientos de la gente», ha censurado este martes Hernando en rueda de prensa tras la Junta de Portavoces después de que la bandera vasca ondease este lunes en el balcón del Ayuntamiento de Pamplona junto a las de España y de Navarra.
Para el portavoz parlamentario del PP, esta acción fue «muy desafortunada» pese a las «excusas» o explicaciones que ha dado el alcalde de Pamplona, que ha justificado la bandera por una cuestión de protocolo por la presencia de tres parlamentarias vascas en el Ayuntamiento.
Hernando considera «un gravísimo error» empezar un mandato «cuestionando Navarra, su autonomía y la Constitución» con una bandera, la ikurriña, que para muchos navarros «puede suponer una línea política con la que no están de acuerdo».
Según ha sostenido, este asunto ya se debatió y quedó zanjado en la Constitución, que estableció que Navarra y País Vasco son dos comunidades autónomas, «respetabilísimas ambas», que «tienen derecho a seguir su camino independientemente».
«Lo que tienen que hacer los responsables institucionales, más allá de la demagogia, es respetar las reglas y las leyes. Creo que ayer el alcalde no lo hizo y me parece un grave error», ha reprochado.