El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha asegurado hoy en una rueda de prensa que la actitud de los separatistas prorrusos en el derribo del vuelo MH17 «no tiene cabida en la comunidad internacional. Están ocultando pruebas, ¿Qué están intentado esconder? Están robando los cuerpos».
Obama no ha otorgado un carácter local, ni siquiera continental, al ataque del avión malasio. Ha calificado el lanzamiento del misil como un ataque planetario. Él mismo se ha puesto en contacto con los líderes de los países afectados y ha asegurado que «todo el mundo tiene el corazón roto».
Recuperar los cuerpos y esclarecer los hechos
«Nuestra principal misión es recuperar los cuerpos e investigar exactamente lo que ocurrió», ha reiterado Obama. Varios investigadores de la Organizacion para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) están sobre el terreno desde hace dias y están preparados y organizados para recoger todas las pruebas pero no tienen acceso total al lugar donde se estrelló el avión. La investigación, por tanto no es plena. Milicias prorrusas están bloqueando las indagacionesy restringiendo el acceso de los investigadores.
Pide a Putin hechos y no palabras
Obama ha mirado directamente hacia Moscú, a quien atribuye buena parte del control sobre las estrategias y decisiones que toman los sublevados al este de Ucrania. Las instituciones paraoficiales que los prorrusos han creado en esta zona del país, se encuentran bajo la órbita del Kremlin. Este mismo domingo, Kiev publicaba un vídeo en el que podía escucharse a varios sublevados pedir que se recogieran rápidamente las cajas negras porque era «una orden de Moscú«.
Desde Washington, el inquilino de la Casa Blanca responsabiliza de forma directa al presidente ruso, Vladimir Putin, pues los milicianos que lanzaron el misil hacia el avión derribado han recibido formación, arsenal y apoyo por parte del Kremlin, según Obama.
«Dada la gran influencia sobre los activistas y de Putrin en particular, lo menos que pueden hacer es colaborar en la investigación.» El presidente estadounidense dice respetar las palabras del presidente ruso pero quiere verlas convertidas en acciones.
Solución diplomática
La solución diplomática aún no tiene todas las puertas cerradas a no ser que «Rusia siga con esta violacion de la ley, que es un peligro para la comunidad internacional».
De momento, las principales potencias de la Unión Europea, se han mostrado en la mísma línea de Washington. Angela Merkel consiguió que Putin se involucrara en la resolución de los hechos y este lunes, David Cameron ha pedido que la UE tenga una posición común.
Justo antes de la rueda de prensa de Obama, el presidente ucraniano, Petro Poroshenko era entrevistado en directo por la CNN, en la que ha pedido al Congreso de EEUU que tal y como ha ocurrido en otras ocasiones, declare como terroristas a los sublevados del este de su país.
Obama ha pedido a Putin que abandone sus intereses: «Es tiempo de que Rusia y Putin salgan de la estrategia que han tomado y cesen las hostilidades». Al mismo tiempo ha tendido un guante a Ucrania y su presidente, al pedir que el pueblo ucraniano «pueda decidir su futuro» y tomar sus propias decisiones.