Miles de palestinos de la Franja de Gaza secundan hoy, por tercer viernes consecutivo, la Gran Marcha del Retorno junto a la frontera con Israel, donde a media mañana se quemaron banderas israelíes y tuvieron lugar los primeros incidentes con el Ejército.
Al menos 4 personas resultaron heridas cuando el Ejército israelí abrió fuego contra decenas de manifestantes que se aproximaron a la valla de separación en la zona de Jan Yunis, al sur del enclave, aseguraron testigos a Efe.
Pasada la oración del mediodía, miles de palestinos acudieron a los cinco campamentos de protesta levantados desde el 30 de marzo, cerca de la frontera israelí, donde ondearon banderas palestinas.
La Gran Marcha del Retorno, con la que los palestinos reclaman el derecho de los refugiados a volver a sus ciudades de origen, es una movilización que durará hasta el 15 de mayo (Día de la Nakba o catástrofe) y en la que ya han muerto 33 palestinos, la mayoría en manifestaciones, además de en incidentes violentos en la frontera.
Salah Abdulati, miembro del comité organizador compuesto por diversos sectores sociales y políticos, explicó a Efe que la manifestación de hoy se centrará en las banderas, después de que el pasado viernes utilizaran los neumáticos como emblema y quemaran cientos de ellos junto a la valla de separación con Israel para obstaculizar la vista de los tiradores israelíes.
«Durante las actividades (de hoy), también serán quemadas banderas israelíes para absorber la ira de los participantes palestinos hasta que Israel cumpla con las demandas de la población en la Franja de Gaza, especialmente el alivio del bloqueo», declaró Abdulati.
Grandes banderas israelíes fueron colocadas a la entrada de los campamentos de protesta, que los palestinos pisaban como símbolo de rechazo a «la potencia ocupante».
El Ejército israelí atribuye estas protestas al movimiento islamista Hamás, que considera terrorista, y ha advertido de que seguirá respondiendo a los «intentos de dispararles, explosivos en la valla, lanzamiento de granadas, bombas incendiarias, piedras y pantallas de humo».
Desde que comenzaran estas manifestaciones, el Ejército ha movilizado a soldados y tiradores que están apostados en montículos de arena en la zona fronteriza para prevenir la aproximación a la valla con medios antidisturbios y también munición real.
El Ministerio de Salud palestino asegura que desde la primera protesta, el pasado 20 de marzo, se ha atendido a más de 1200 heridos de bala.
Más de 30.000 personas participaron en la primera convocatoria de la Gran Marcha del Retorno y 20.000 lo hicieron el pasado viernes en unas manifestaciones que congregan a un gran número de familias y que suele aumentar en asistencia e incidentes según transcurre la jornada.