En la rueda de prensa del Consejo de Ministros, Grande-Marlaska ha respondido así a las críticas de sectores independentistas que cuestionan la detención de la Policía Nacional al asegurar que no había orden de detención.
«La causa por delitos de desórdenes públicos está judicializada después de una denuncia de Adif», ha recordado el ministro, que ha añadido que, por tanto, «toda la instrucción estaba supervisada por el fiscal y el juez de instructor».
Grande-Marlaska se ha detenido en las 16 detenciones, entre ellas dos alcaldes de la CUP y un sobrino del presidente de la Generalitat, Quim Torra para decir que fue «no sólo supervisada» sino que se informó de «todo el conjunto de actuaciones».
«Se actuó como Policía Judicial», ha insistido, recordando que una operación supervisada por la autoridad judicial a él en particular, que es juez de profesión, le cuesta «que pueda considerarse ni en hipótesis como desproporcionada».