El socio-liberal Emmanuel Macron, uno de los candidatos favoritos a vencer las elecciones presidenciales francesas de abril y mayo, dijo hoy que la alianza electoral con el centrista François Bayrou tiene como meta acabar con «la fractura política» en Francia «entre la izquierda y la derecha».
Al término de un encuentro en el Palacio de Tokio de París, ambos comparecieron ante la prensa para explicar los motivos de su alianza electoral, anunciada ayer y que puede suponer un obstáculo en la carrera al Elíseo de los otros dos favoritos: la ultraderechista Marine Le Pen y el candidato de la derecha François Fillon.
«Esta alianza corresponde a lo que debemos hacer en este contexto. Hay que saber unirse, reagruparse» y acabar con la histórica «fractura» entre la izquierda y la derecha, opinó Macron, quien consideró el pacto con Bayrou «una renovación de la vida política» en el país.
Bayrou, alcalde de Pau, abogó por superar «las diferencias» en un arriesgado contexto como el actual, con Le Pen encabezando las encuestas, y consideró que esta alianza podrá rescatar a una mayoría de franceses que sienten «perdidos» en «el gran marasmo» del panorama político en el país.
Entre cuatro condiciones para contribuir a la campaña de Macron, Bayrou citó «la moralización» de la vida política.
El dirigente centrista del partido MoDem anunció el miércoles que no se representaba a las elecciones del 23 de abril y el 7 de mayo para no fragmentar los apoyos de los votantes moderados en beneficio de la ultraderecha.
Las encuestas aún no han cuantificado cómo beneficiará esta alianza a un Macron venido a menos en la intención de voto en las encuestas de la última semana.
A Bayrou, que en las elecciones de 2012 logró en torno al 10 % de sufragios, los sondeos le otorgaban en torno al 5 % de la intención de voto en Francia.