El candidato demócrata a la Vicepresidencia, Tim Kaine, aseguró hoy en Miami que los inmigrantes llevan tres años esperando la aprobación de una reforma migratoria y criticó que la Cámara Baja bloqueara un proyecto en ese sentido en 2013.
En su primera comparecencia en público junto a la candidata demócrata Hillary Clinton, el senador de Virginia, quien habló en varias ocasiones en español y de su experiencia como misionero en Honduras, se mostró como un defensor de las minorías.
Kaine criticó que la Cámara de Representantes, dominada por el Partido Republicano, no diera luz verde a una reforma migratoria cuando el Senado había aprobado un proyecto bipartidista que regularizaba a cerca de once millones de indocumentados.
El senador dijo que su viaje a Honduras «le había cambiado la vida» y que comparte los mismos valores de la comunidad latina en el país.
La fórmula presidencial de Clinton se presentó como un detractor de muros y partidario de puentes, en un discurso en el que alabó la diversidad de género, raza y preferencias sexuales.
El senador habló a ratos en un fluido español, idioma que aprendió en sus tiempos como misionero en Honduras, y elogió a la comunidad latina, de la que, según dijo, aprendió sus valores: «fe, trabajo y familia».
«Bienvenidos a todos a nuestro país, porque todos somos americanos», subrayó en un guiño a un público mayoritariamente hispano con quienes dijo compartir los mismos valores.
El exgobernador de Virginia dijo que «Estados Unidos no se construye con miedo, sino con valor, imaginación y determinación».