El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha pedido este jueves -durante la cuestión de confianza a Puigdemont– que los partidos independentistas se planteen «colaborar» para impulsar un gobierno alternativo al del PP liderado por los socialistas.
«No pido que cambien los objetivos, sino que se planteen colaborar con el cambio político en España, que no condicionen la investidura a la obtención de un referéndum», ha destacado en su turno de réplica, mientras en Ferraz se libra una batalla interna por las diferencias internas sobre la investidura.
El socialista cree que con un gobierno liderado por el PSOE todos saldrían ganando –ya que los críticos se niegan a dialogar con los independentistas-, y defiende que sólo así es posible recuperar el diálogo y la negociación entre el Estado y la Generalitat, como único camino posible para mejorar el encaje de Cataluña en España: «No hay una solución unilateral a un problema que es español».
A juicio de Iceta, el Govern no tiene la legitimidad para impulsar un referéndum unilateral de independencia y Puigdemont no está cumpliendo sus compromisos, como el de internacionalizar el proceso soberanista: «¿En estos ocho meses se ha visto con algún primer ministro de uno de los 28 países de la UE?».
Asimismo, ha mostrado la predisposición del PSC a apoyar al Ejecutivo catalán a rehacer puentes con el Estado, solucionar los conflictos competenciales y mejorar el sistema de financiación, y ha llamado a apoyar la reforma federal de la constitución que defienden los socialistas, aunque ha admitido que se trata de una propuesta de compleja consecución.
También ha augurado que las leyes de ruptura promovidas por JxSí y la CUP están condenadas al fracaso y serán anuladas unánimemente por el Tribunal Constitucional (TC), y ha puesto en duda que realmente permitan alcanzar la independencia, porque no concretan nada: «No engañemos a los ciudadanos. Si una ley de desconexión no desconecta, ¿es una ley de desconexión?».
“Parecen la negociación del Íbex”
El líder de los socialistas catalanes ha ironizado con los cambios en la hoja de ruta independentista, que «parecen la negociación del Íbex», y ha celebrado que Puigdemont no se haya referido en la cuestión de confianza a la asamblea constituyente que sí preveían las conclusiones de la comisión del Parlament de estudio del proceso constituyente.
Ante las variaciones en los planes del Govern, Iceta ha reclamado concreción para saber «a qué atenerse», y ha avisado de que situar las instituciones al margen de la legalidad tendrá consecuencias indeseadas e inevitables.
«No compartimos su objetivo y por eso no le daremos apoyo» en la cuestión de confianza, ha resumido Iceta, que ha llamado a no conformarse con el empate infinito entre los independentistas y los que no lo son, y a trabajar por lograr un objetivo de consenso que cuente con el aval de la mayoría de ciudadanos.