Según los resultados oficiales hechos públicos el pasado día 20, la «práctica totalidad» de los representantes electos pertenecen a un único partido político –el Partido Democrático de Guinea Ecuatorial del dictador Teodor Obiang–.
Exteriores añade que «los*partidos de la oposición y algunas organizaciones de la sociedad civil han denunciado carencias organizativas e irregularidades graves durante la campaña electoral y la propia jornada de votación».
El Gobierno español asegura que ha seguido «con particular atención el desarrollo, sin incidentes graves» de las elecciones del pasado 12 de noviembre y que, desde el «pleno respeto a la soberanía y a las instituciones de Guinea Ecuatorial», mantiene «un diálogo constante con las fuerzas políticas ecuatoguineanas para promover la democracia, el respeto de los derechos humanos y el Estado de Derecho, elementos básicos para mejorar el bienestar de todos sus ciudadanos».