El Ejército sirio prosiguió hoy los combates contra los combatientes del radical Estado Islámico (EI) en la provincia siria de Al Hasaka, en el norte del país, después de que el régimen haya recuperado varias zonas y perdido una base militar.
En un comunicado, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos dio hoy cuenta de los choques entre ambas partes en la zona 47, donde se encuentra la carretera que une las provincias de Al Hasaka y Deir al Zur (noreste), aunque no informó del número de víctimas.
Los enfrentamientos se iniciaron anoche y han estado acompañados de fuertes bombardeos por parte de las fuerzas del régimen sirio.
Según el Observatorio, los extremistas del EI se hicieron con el control total de la base del regimiento castrense de Al Melibiya, al sur de la capital homónima provincial.
Por otro lado, una fuente de seguridad informó a la agencia de oficial noticias siria Sana de que el ejército gubernamental recuperó la prisión de menores, la central eléctrica de Al Hasaka, un cementerio y la zona de Al Ahrash, en el acceso meridional a la provincia.
Decenas de yihadistas, en su mayoría de nacionalidad extranjera, murieron en los choques y tres de sus vehículos -con armas pesadas- fueron destruidos por el ejército, según Sana.
En esta ciudad, los militares abortaron hace dos días un ataque de los yihadistas contra la sede del gubernamental partido Al Baaz.
El Observatorio señaló entonces que al menos doce miembros de la formación política y guardias del lugar perdieron la vida en los choques en Al Hasaka.
En las últimos dos semanas, los radicales han efectuado varios ataques contra objetivos gubernamentales, en los que al menos 484 partidarios del régimen de Bachar al Asad han fallecido, según las cifras del Observatorio.
El EI proclamó a finales de junio un califato islámico en Siria e Irak, tras avanzar sobre el terreno en ambos países.