El grupo terrorista Estado Islámico (EI) reivindicó hoy el atentado en la ciudad central siria de Hama, controlada por las autoridades y donde, según medios oficiales, ha habido dos muertos y diez heridos.
En un comunicado publicado en Twitter y cuya autenticidad no pudo ser comprobada, los radicales informaron de que tres de sus miembros detonaron cinturones de explosivos que llevaban adosados a sus cuerpos en esa localidad, después de atravesar varios controles de seguridad.
La nota explica que uno de los yihadistas hizo estallar su carga explosiva en la sede del gobernante Partido Al Baaz, mientras que un segundo lo hizo en una comisaría de policía y un tercero en medio de un grupo de «nusairis», en referencia a los alauíes, secta a la que pertenece el presidente sirio, Bachar al Asad.
El EI aseguró que este triple atentado causó decenas de heridos.
Anteriormente, la televisión siria había informado de un atentado perpetrado por dos suicidas en Hama en la plaza de Al Asi, en la entrada del barrio Al Hader.
Un primer terrorista detonó un cinturón de explosivos adosado a su cuerpo en ese lugar, y un cuarto de hora después hubo un segundo estallido originado por otro suicida, indicó la televisión.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos confirmó la cifra de dos fallecidos y elevó la de heridos a catorce personas.
La ONG también habló de dos suicidas y precisó que se inmolaron en la sede local de Al Baaz.
La ciudad de Hama, capital de la provincia homónima, ha estado relativamente libre de ataques desde el comienzo del conflicto en Siria en marzo de 2011.
No obstante, desde finales de septiembre, facciones armadas islámicas y rebeldes desarrollan una ofensiva en el norte de la provincia de Hama.