El octavo y último convoy de combatientes y civiles evacuados de la región de Guta Oriental, en las afueras de Damasco, fue blanco de disparos por hombres armados leales al Gobierno sirio y seis personas resultaron heridas, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El convoy fue atacado cuando pasaba por la localidad de Bait Yashut, en dirección hacia la población de Qala al Madiq, en la provincia de Hama (centro), adonde llegaron los evacuados esta madrugada, antes de ser llevados a su destino final en la provincia de Idleb, en el noreste de Siria.
Según la fuente,
Entre los seis heridos hay dos niños y una mujer, según la fuente.
Unas 3.000 personas salieron en la última tanda de evacuados de las zonas de Arbín, Zamalka, Ain Tarma y el barrio damasceno de Yobar, después de que el ejército gubernamental se hiciera con el control de este territorio.
Según el Observatorio, un total de 46.400 personas, entre ellas 12.000 combatientes de facciones islamistas, han abandonado Guta Oriental en dirección a Idleb en virtud de los acuerdos entre los grupos armados que operan en la zona y Rusia, aliada del Gobierno sirio.
La fuente detalló que 41.400 personas -entre combatientes, familiares de estos y otros civiles- salieron de Zamalka, Arbín y Yobar, y otras 5.000 de la ciudad de Harasta, que cayó en manos de las fuerzas sirias en marzo.
Mientras, 40.000 civiles han decidido permanecer en Kafr Batna, Ain Tarma, Saqba y Harasta, todas ellas en Guta Oriental y controladas por el ejército.
Tras el anuncio ayer por parte de las Fuerzas Armadas de la toma de control de Arbín, Ain Tarma, Zamalka y Yobar, las autoridades dominan actualmente el 94 por ciento de Guta Oriental, según el Observatorio.
La región era considerada el principal bastión opositor a las afueras de la capital desde hace varios años.