La consigna, que ha sido desplegada a última hora del jueves, cubre parte de la fachada de un edificio situado en el mismo lugar donde se realizarán, dentro de unas horas, los actos en recuerdo de los atentados. En ella, además, se puede apreciar un retrato del Rey boca abajo, y las palabras «not welcome» (no es bien recibido) señaladas en letras rojas.
En el acto, que comenzará a las 10.30, habrá música y lecturas en los siete idiomas de las víctimas mortales. Durante la conmemoración, además, no se realizarán parlamentos institucionales, buscando así que el protagonismo recaiga en los familiares de las víctimas y los heridos.
La presencia de la pancarta choca con la petición que han realizado familiares e instituciones relacionadas con los ataques de Barcelona y Cambrils, y que solicitaban no utilizar los homenajes con fines partidistas.