El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy los «inaceptables» bombardeos del Ejército sirio contra la ciudad de Homs, y alertó a Damasco de que no puede escudarse en la falta de acuerdo en el Consejo de Seguridad para incrementar los ataques «contra la población».
Ban «está conmocionado por la escalada de la violencia en Siria, particularmente ante el aumento del número de muertes y el continuo asalto a la ciudad de Homs mediante el uso de artillería pesada y el bombardeo de áreas civiles», expresó su portavoz, Martin Nesirky, en un comunicado.
La ciudad de Homs, uno de los principales focos de la resistencia siria al régimen de Bachar al Asad, volvió hoy a ser objeto de intensos bombardeos por el Ejército sirio, en los que al menos 57 personas murieron, según el grupo opositor Comisión General de la Revolución Siria.
El máximo responsable de la ONU condenó «enérgicamente» esos ataques, y agregó que «ese tipo de violencia es totalmente inaceptable ante la humanidad» y que «ningún Gobierno puede cometer esos actos contra su propio pueblo sin que se merme su legitimidad», al tiempo que pidió el cese «inmediato» de «toda la violencia».
La falta de acuerdo en el Consejo de Seguridad «no da ninguna licencia» a las autoridades sirias para que incrementen los ataques contra la población, añadió Ban, en referencia al veto ejercido el sábado por Rusia y China en el máximo órgano de decisión de la ONU y que evitó una condena al régimen de Al Asad.
El diplomático surcoreano recordó que, bajo las leyes humanitarias internacionales, al Gobierno sirio es «responsable de todos los actos de violencia» perpetrados por sus fuerzas de seguridad contra la población civil, según el comunicado.
El secretario general de la ONU pide a todas las partes en Siria y a la comunidad internacional que «redoblen» sus esfuerzos para detener la violencia y lograr un proceso político «sin exclusiones» dirigido por los sirios de acuerdo al derecho internacional, según Nesirky.
Ban destacó la necesidad de que ese proceso respete la voluntad y las aspiraciones de pueblo sirio de lograr un sistema político democrático y plural.
El máximo responsable de la ONU ha pedido en distintas ocasiones a los 15 miembros del Consejo de Seguridad que condenen de manera unánime la violencia en Siria, algo que ha sido imposible hasta al momento después de que Rusia y China hayan vetado ya en dos ocasiones, primero en octubre y la última vez el pasado sábado, una resolución contra Damasco.