Tal día de 1946 nacía en Stone Town, Zanzíbar (actual Tanzania), Farrokh Bulsara. Más tarde, este indú emigrante en Reino Unido sería recordado por la historia de la música como Freddie Mercury, cantante y compositor de la banda británica Queen. Una personalidad fuerte, una voz poderosa y una puesta en escena impontentes hacían un combo perfecto para el que sería recordado por muchos como el cantante más grande de la historia del rock. Este 04 de septiembre teinteresa.es repasa sus canciones menos reconocidas, verdaderas obras de arte que fueron eclipsadas por otras como Bohemian Rapsody o We are the Champion, pero que sin embargo fueron reconocidas por un buen sector de la crítica y sobreviven en algún rincón polvoriento de YouTube.
Keep yourself alive, álbum debut
Y tanto que se mantuvieron vivos. Con este infravaorado sencillo Queen irrumpía en el mercado con su primer disco. No hicieron mucho ruído, pero curiosamente consiguieron a reunir fans en Japón. En Estados Unidos apenas fue radiado.
Tie your mother down, 1976
Incluida en «A Day at the Races» (1976), uno de sus primeros trabajos y escritoa por Bryan May. Un tema 100% rockero para no para de saltar que nada le tiene que envidiar los grandes hits de la banda. A pesar de estar algunas semanas en el número uno, no entró en el Greatest Hits de la banda.
Liar, 1974
Freddie Mercury escribió esta canción en 1970 cuando aún se llamaba Farrokh Bomi Bulsara. Algunos la consideran la precursora de Bohemian Rapsody por su rock desenfadado, la mezcla de estilos, los coros psicodélicos y los potentes riffs de guitarra.
The march of the black queen, 1974
Loca y cambiante, es la novena pista de su segundo disco Queen II. Otro Bohemian Rapsody bebé que demuestra la buena compenetración vocal de los componentes del grupo. Un sinfín de cambios de humor y ritmo que dejan una pieza loca e imprevisible. Toda una joya que no llega al millón de visitas en YouTube.
Life is real (song for Lennon), 1982
Lanzada dos años después de la muerte del cantante de Liverpool, Freddie quiso realizar su particular homenaje con una canción teñida de tonos Lennon. Un piano melancólico y una melodía costante para una letra empapada de melancolía.