La varicela ha cogido un tinte oscuro en los últimos meses. Así se desprende de los datos recogidos en el Boletín Epidemiológico del Instituto de Salud Carlos III que contabiliza el número de casos declarados hasta el pasado 4 de mayo. Hasta esa fecha, se habían producido un total de 63.136 casos, cuando en el mismo periodo de 2013 se habían registrado 54.173, 8.963 menos.
El número de casos está aumentando de forma significativa de una semana a otra. De hecho, del 28 de abril al 4 de mayo (semana 18 de 2014 para el Carlos III) se registraron 3.763 casos, 554 más que los 3.182 de la misma semana de 2013. Y en la semana anterior, del 21 al 27 de abril, hubo 5.274 casos, 1.222 más que los 4.052 de esa misma semana un año antes.
Un aumento que contrasta con el descenso de casos que se había registrado en 2013. En la misma semana 18 del año pasado se llevaban notificados un 12,7 por ciento de menos casos en comparación con el mismo periodo de 2012.
En total, en todo 2013 se registraron 140.629 casos de varicela, un 2 por ciento menos que los 143.594 de 2012, según datos del Carlos III.
La Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) relaciona este incremento con la falta de vacunación ante las restricciones en el suministro de vacunas a las oficinas de farmacia, que llevó al laboratorio fabricante, Sanofi Pasteur MSD, a denunciar al Ministerio de Sanidad por no poder venderlas libremente como hasta ahora.
De hecho, si en un año normal dispensaban en torno a 320.000 unidades a las oficinas de farmacia, desde septiembre a diciembre de 2013 apenas vendieron 20.000 unidades y desde enero a abril unas 17.000 unidades, lo que haría un total de 37.000 unidades en 9 meses, recuerda FEFE en su Observatorio del Medicamento de mayo.
En virtud de estos datos, y proyectando el actual consumo a un año completo, aseguran que «no se pasaría de las 48.000 unidades», por lo que «es de esperar un importante repunte de la epidemiología de la enfermedad».
El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), en el que están representados el Ministerio y las comunidades, acordó en marzo de 2013 el primer calendario vacunal común para todo el Sistema Nacional de Salud (SNS), que precisaba que la vacuna de la varicela debía administrarse (y, por tanto, financiarse) a los 12 años en aquellos niños que no hubieran pasado aún la enfermedad.
Una situación que propició que, meses más tarde, que la vacuna comenzara a sufrir las primeras restricciones en la liberación de lotes a las oficinas de farmacia para que los ciudadanos pudieran adquirirla libremente (asumiendo su coste íntegramente).
Las recomendaciones de la OMS
• La mayoría de los países en desarrollo tienen otras enfermedades prevenibles mediante vacunas que producen una morbilidad y una mortalidad considerablemente mayores, y la introducción sistemática de la vacuna contra la varicela en sus programas nacionales de inmunización no es prioritaria.
• Se puede plantear la inmunización infantil sistemática contra la varicela en los países en los que la enfermedad sea un problema de salud pública y socioeconómico importante, en los que la vacuna sea asequible y en los que se pueda alcanzar una cobertura elevada (85%-90%) y sostenida de la vacunación. (En teoría la inmunización infantil con una cobertura menor puede modificar la epidemiología de la enfermedad y aumentar el número de casos graves en los niños de más edad y los adultos.)
• Además, se puede ofrecer la vacuna en cualquier país a los adolescentes y los adultos que no tengan antecedentes de varicela, en particular los que corren un riesgo mayor de contraer o propagar la infección. Este uso en los adolescentes y los adultos no supone ningún riesgo de cambio en la epidemiología, puesto que la exposición al VZV durante la infancia no se ve afectada.