Las fuerzas gubernamentales sirias y milicias aliadas avanzaron hoy en la ciudad de Albukamal (este) para expulsar de su último bastión en el país al grupo terrorista Estado Islámico (EI), que lo reconquistó hace una semana, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG aseguró que los efectivos leales al presidente sirio, Bachar al Asad, obligaron a los combatientes del EI a retirarse hacia la parte septentrional de la urbe, fronteriza con Irak.
Las fuerzas gubernamentales intentan arrebatar de nuevo a los yihadistas el control de Albukamal, que fue tomada por el Ejército el pasado día 9 pero recuperada por el EI dos días después.
Por su parte, los extremistas tratan de repeler este nuevo ataque de los efectivos del Gobierno y mantener el dominio de su último gran feudo urbano en todo el país, según el Observatorio.
Hace dos días, el Ejército sirio y grupos armados chiíes que le apoyan se hicieron con el control del aeropuerto de Al Hamdan, a las afueras de Albukamal.
Las fuerzas gubernamentales se habían retirado a principios de la semana hacia las afueras de Albukamal, a la espera de la llegada de refuerzos militares para realizar un nuevo ataque sobre la ciudad.
Albukamal es actualmente el mayor bastión que queda en manos de los extremistas en Siria, que han perdido el control del territorio al otro lado de la frontera, en Irak, adonde enviaban suministros militares en los últimos tres años a través de esta zona.