El diputado autonómico de AGE, Ramón Vázquez, aseguró esta mañana a la puerta de los Juzgados de Lugo que el expresidente provincial del PP José Luis Iravedra, que hoy prestó declaración como imputado por un supuesto delito electoral, es el «protegido» tanto «del señor Feijóo como del señor Barreiro», por lo que «sabe de épocas muy oscuras» de su partido.
Ramón Vázquez opina que la imputación de los cargos del PP por un supuesto delito electoral no es más que «la constatación de algo que la ciudadanía conocía desde hace tiempo, que son las prácticas del Partido Popular, sobre todo en el medio rural, pero también en el medio urbano, como lo constatan las imágenes» incorporadas a la causa.
Desde su punto de vista, lo sucedido en esa oficina electoral en 2012 «demuestra que el Partido Popular está dispuesto a llegar a donde sea para mantenerse en el poder, incluso «utilizando mecanismos de financiación irregular» o «comportamientos mafiosos desde el punto de vista electoral, acarreando ancianos» a las urnas.
Según el diputado de AGE, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, «intentó escurrir el bulto» en «sede parlamentaria», lo mismo «que hace el señor -José Manuel- Barreiro», presidente del Partido Popular en la provincia de Lugo.
«Nosotros nos preguntamos qué favores le deben al señor Iravedra, quizás por sus servicios prestados como tesorero del Partido Popular. Pensamos que detrás de todo esto se esconde todo lo que el señor Iravedra sabe de épocas muy oscuras del Partido Popular. Por eso es el protegido, tanto del señor Feijóo como del señor Barreiro», añadió.
Según Vázquez, «lo que tiene que hacer el señor Feijóo es cesar a este señor».
«Lo mismo le digo al señor Barreiro, que lo nombró a dedo dentro de la Ejecutiva provincial del PP», insistió el diputado.
En cuanto a la causa, afirmó que «los informes de los forenses son taxativos», porque «las personas que acarrearon tanto el señor Iravedra como la señora Taboada tenían alzheimer y demencia senil en grado severo».
Por su parte, el diputado de AGE recordó que él nunca se refiere a este asunto como «presunto delito», sino como «delito», porque los miembros de su partido que estaban en esa mesa electoral no sólo «son denunciantes», sino también «testigos».
«Lo vi con mis propios ojos. Había una cola de una veintena de ancianos» para votar en esa mesa electoral.
El letrado de Esquerda Unida, Guillermo Presa, por su parte, afirmó que las «imágenes» tomadas por los reporteros gráficos de varios medios de comunicación «demuestran que la presencia extraña de esa gente en aquella oficina electoral tiene contenido delictivo».
En cuanto al delito electoral, recordó que «hay diferentes figuras», todavía sin definir en este caso, porque «no es el momento procesal para concretar las imputaciones». Por lo tanto, precisó, también es «un poco prematuro para hablar de penas».