Un hombre de 39 años y vecino de Barcelona ha sido detenido durante la pasada noche por la Policía Foral como presunto autor de un delito contra la salud pública, en el camping de Ezcaba, en Oricáin.
Tras ser alertados de que una persona ofrecía drogas a los clientes, una patrulla de Prevención y Atención Ciudadana de la Policía Foral de Pamplona se dirigió al camping e identificaron al sospechoso, al que le fueron registradas sus pertenencias y le fueron intervenidos 1.375 euros en billetes fraccionados; 213 pastillas que pudieran ser éxtasis de un peso aproximado cada una de 0,3 gramos; 31 bolsitas autocierre con una sustancia cristalina y color marrón que pudiera ser MDMA y de peso aproximado cada una de 1,2 gramos; 27 bolsitas autocierre con sustancia blanca que pudiera ser cocaína y de peso aproximado cada una de las bolsitas de 0,8 gramos, y numerosas bolsitas autocierre de similares características a las que contienen las sustancias estupefacientes.
Además, los agentes hallaron en su poder cuatro latas de cerveza preparadas para ocultar sustancias estupefacientes, preparadas con un hueco estanco en su interior y cuyo peso era similar al de una lata precintada.
El detenido, acusado de un presunto delito contra la salud pública, ha sido trasladado a la Comisaría de Policía Foral en Pamplona, donde se han realizado las oportunas investigaciones y diligencias, que han sido puestas en conocimiento del Juzgado de Instrucción número 1 de Pamplona.
10 KILOS DE MARIHUANA
Por otra parte, la Policía Foral detuvo, el pasado 30 de junio, a un joven que transportaba en un coche 10 kilos de marihuana. Los agentes del Grupo de Prevención y Atención Ciudadana de la Comisaría de Elizondo que practicaban un control rutinario de seguridad ciudadana ordenaron al conductor de un vehículo que se detuviera, y al acercarse percibieron un intenso olor a marihuana, por lo que pidieron a su único ocupante, B.E.I de 28 años y vecino del valle del Baztán, que abriera el maletero.
En el interior del mismo había un saco de harina de grandes dimensiones que contenía 17 bolsas envasadas al vacío y con material herbáceo. Al ser preguntado sobre la sustancia, B.E.I admitió que era marihuana y que en total transportaba 10 kilos comprados recientemente en Irún. En el registro del vehículo se intervinieron además 3 teléfonos móviles supuestamente utilizados para la comisión del delito.
Los hechos fueron puestos en conocimiento del Juzgado de Instrucción número 1 de Pamplona, cuyo titular decretó el ingreso en prisión del detenido, ha informado el Gobierno foral en un comunicado.