Keles Ozturk, abogado del liberado, Adil Demirci, de 33 años y acusado a participar en «actividades terroristas», había pedido a las autoridades que le permitieran viajar a Alemania para ver a su madre, quien padece un cáncer.
Tamer Demirci, hermano del liberado, ha indicado que la decisión del tribunal impidiendo que abandone Turquía implica que ha quedado en «una prisión a cielo abierto». El juicio continuará el 30 de abril.
Demirci, quien escribía para la agencia de noticias ETHA, está acusado de ser miembro del Partido Comunista Marxista-Leninista (MLKP), un grupo izquierdista considerado como una organización terrorista en Turquía.
La Fiscalía le acusa de «participar en manifestaciones no autorizadas con cócteles molotov» en nombre del MLKP entre 2013 y 2016 y de acudir a funerales de miembros del grupo.
Algunos de estos actos fueron en memoria de miembros del brazo armado del grupo, que combatieron en Siria contra el grupo yihadista Estado Islámico. Demirci ha rechazado las acusaciones por terrorismo, si bien ha admitido estar presente en dichos funerales.
De esta forma, el número de ciudadanos turcos detenidos en Turquía por acusaciones de terrorismo o motivos políticos es de tres, respecto a los ocho encarcelados a mediados de 2018. Esta situación tensó las relaciones entre Ankara y Berlín.