«Todos los días moría una de nosotras y solamente esperábamos a que nos llegara el turno. No nos permitían movernos ni un centímetro», afirma una de las víctimas de Boko Haram, Asabe Umaru, en declaraciones a Reuters. «Si tenías que ir al servicio, te acompañaban. Nos retenían en un solo lugar, cautivas», añade la mujer.
Los testimonios de las mujeres secuestrada por Boko Haram son desgarradores: muestran el horror y las torturas a las que fueron sometidas durante su cautiverio. Mujeres rescatadas de las garras de Boko Haram relatan el horror sufrido.
Umaru, de 24 años y madre de dos hijos, ha explicado que cuando vieron a los soldados levantaron las manos y gritaron pidiendo ayuda. «Entonces los de Boko Haram que nos vigilaban nos tiraron piedras para obligarnos a seguirles a otro escondite, pero nos negamos porque sabíamos que los militares iban a salvarnos», ha apuntado en declaraciones a Reuters. «Damos gracias a Dios por estar vivas a día de hoy. Damos gracias al Ejército nigeriano por salvarnos la vida», ha añadido.
Algunas de las casi 700 mujeres y niñas rescatadas durante la última semana de las garras del grupo yihadista nigeriano Boko Haram han relatado el horror sufrido durante su cautiverio, muchas veces iniciado tras presenciar la ejecución de los niños y hombres. Otras muchas han perecido de hambre o por enfermedades en los bosques de Sambisa donde eran retenidas.
Otra liberada, Cecilia Abel, ha relatado que su marido y su hijo primogénito fueron ejecutados delante suya y después fue llevada junto a sus otros ocho hijos al bosque, donde pasaron casi dos semanas sin apenas comer.
«Solo nos daban harina de maíz por las tardes. No era apta para el consumo humano. Muchos de los que fuimos capturados, murieron en el bosque de Sambisa», ha relatado. Incluso después del rescate, otras diez murieron de camino aquí», ha indicado.
Otras de las ex rehenes de Boka Haram, Lami Musa ha explicado que “ Me secuestraron para que me casara con uno de sus jefes. Cuando se dieron cuenta de que esperaba un bebé, me dijeron que me había embarazado un infiel y mataron a mi marido. Añadieron que una vez que diera a luz, pasada una semana tendría que casarme con uno de sus comandantes. Di a luz por la noche y al día siguiente nos liberaron los soldados.”
ªA su llegada, las mujeres recibieron pan y te caliente y 19 de ellas han sido hospitalizadas, ha explicado el doctor Mohammed Aminu Sulieman, responsable de la Agencia de Gestión de Emergencias del estado de Adamawa.
“los que consiguieron escapar de los ataques por sí mismos tienen importantes traumas psicológicos. Y los que han estado en cautividad durante varios meses, llegan en un estado terrible”, dice este doctor.
Amnistía Internacional estima que Boko Haram ha secuestrado a 2.000 mujeres y niñas desde principios de 2014, muchas de ellas utilizadas como cocineras, esclavas sexuales o escudos humanos. Entre los casos más llamativos está el de las 200 colegialas secuestradas en un instituto internado de Chibok apresadas hace ya un año. Sin embargo, parece que ellas no están entre las últimas liberadas.