«La producción del campo petrolero, operado por Mellitah Oil and Gas Company, no se ha visto interrumpida. El suministro de gas continúa fluyendo a la central eléctrica de Ruais», ha señalado en su comunicado.
Así, ha dado las gracias a los responsables del bloqueo por «dar marcha atrás y hacer caso de la advertencia de la corporación sobre sus actividades», al tiempo que ha reiterado que «no negociará bajo amenazas».
«La NOC opera en favor de los intereses nacionales y pide a la GIP y a todas las instituciones libias que hagan lo mismo para proteger la riqueza y sustento del pueblo libio», ha manifestado.
Horas antes, había denunciado que el bloqueo era «un intento de chantajear a Mellitah Oil and Gas Company para que conceda un contrato de catering», antes de advertir de que si la situación se prolonga, la compañía «se verá forzada a suspender todas las operaciones en Uafa y evacuar a todos sus empleados».
Libia se encuentra inmersa en el caos desde la caída del régimen de Muamar Gadafi, dividida ‘de facto’ entre dos administraciones y salpicada aún por una amalgama de milicias armadas. Las principales facciones llegaron en mayo a un principio de acuerdo para celebrar elecciones parlamentarias y presidenciales el próximo 10 de diciembre.