Al menos 28 personas murieron y decenas resultaron heridas en Centroáfrica en enfrentamientos entre grupos armados que estallaron el martes en Mbrés, al norte de la capital, Bangui, informaron el jueves fuentes de la gendarmería.
«Violentos enfrentamientos estallaron el martes en el centro de Mbrés entre elementos anti-balaka (de mayoría cristiana) y exSeleka (básicamente musulmanes)», explicó a la AFP bajo el anonimato un responsable de la gendarmería, añadiendo que hay «al menos 28 muertos y varias decenas de heridos según un balance provisional de la Cruz Roja local».
Los combates entre los milicianos, mayoritariamente cristianos antibalaka y exrebeldes Seleka prosiguieron el miércoles, provocando la huida de centenares de habitantes aterrorizados.
Este jueves, los antibalaka estaban «atrincherados en las montañas de Mbrés y en las cuevas, mientras que los exSeleka controlan el centro, donde dictan su ley», dijo la fuente.
Esta escalada de violencia intervino pocos días después de una ceremonia de reconciliación entre ambos campos organizados en la ciudad bajo la égida de la fuerza de la ONU (Minusca).
La región de Mbrés ya ha sido escenario de ataques de ambos grupos armados en meses anteriores. Las autoridades administrativas de Mbrés abandonaron la localidad y se hallan en su mayoría en Bangui, esperando la normalización de la situación.
Desde la toma del poder, en marzo de 2013, por parte de la coalición rebelde Seleka -expulsada a su vez en enero de 2014-, República Centroafricana se ha sumido en una crisis política y de seguridad sin precedentes.
Tres fuerzas internacionales están desplegadas en el país para tratar de estabilizarlo: Sangaris (francesa), Eufor-RCA (UE) y Minusca.