El pasado sábado una barcaza con más de casi mil personas intentó alcanzar la costa italiana. La mayoría de sus ocupantes eran eritreos que huían de Eritrea. ¿Por qué huye la gente de su país?
Este país ocupa en el Informe de Libertad de Prensa de 2013, Reporteros Sin Fronteras lo sitúa en la última posición de 179 países analizados, y el Índice de Percepción de la Corrupción de 2012 de Transparencia Internacional le concede el puesto 150 de 176.
Se trata de un estado que está situado en una de las regiones más peligrosas del mundo, situación a la que hay que sumar una guerra que le enfrentó a Etiopía en 1998 por motivos fronterizos. Aunque se firmó un acurdo de paz en el años 2000, las tropas etíopes continúan en la frontera por alimentando la inestabilidad entre ambos países.
Además, hay que añadir que Eritrea es conocida como la Corea del Norte Africana dado permeabilidad de las fronteras. La ONU estima que 3.000 eritreos abandonaron el país cada mes del año pasado. Huyen de la pobreza, el servicio militar obligatorio, la falta de libertad de expresión, reunión y religión, las detenciones arbitrarias, las condiciones insalubres, y la tortura, en las prisiones, las ejecuciones extrajudiciales y la muerte, aunque ello suponga toparse con ella como ocurrió en Lampedusa.
Eritrea y Corea del Norte, los países con más censura
El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) ha hecho pública este martes su lista de los diez países con más censura del mundo, en la que Eritrea y Corea del Norte ocupan respectivamente el primer y el segundo puesto.
Eritrea es el país africano con más periodistas entre rejas, con al menos 23 personas que ni siquiera han sido enjuiciados o acusados de cometer delitos. Además, explica que menos del uno por ciento de la población del país se conecta a Internet.
Te encarcelan si descubren que eres cristiano
En 2002 se cerraron todas las iglesias evangélicas, siguiendo una censura impuesta por el gobierno sobre los grupos religiosos, la cual no afecta a los ortodoxos, católicos, luteranos e islámicos. l gobierno es muy severo con los cristianos no tradicionales.
Las amenazas por parte de miembros de la iglesia ortodoxa y la presión de los islamistas, son una constante en la vida de los cristianos. Los que son descubiertos acaban siendo arrestados y encarcelados en contenedores de transportes en campos militares.