Belgas, alemanes, franceses, españoles…cada vez son más los extranjeros que se unen a las filas rebeldes para combatir contras las fuerzas leales a Bashar Al Assad.
Un informe del ICSR ( International Centre for the Study of Radicalisation) subraya el aumento de la presencia de combatientes de origen europeo en las filas rebeldes y advierte sobre la posibilidad de que el terrorismo yihaidsta aumente en territorio europeo cuando estos guerrillero regresen a sus países de origen.
Según este informe, entre 2000 y 5.500 extranjeros han viajado a Siria para luchar. De ellos, entre un 7 y 11 por ciento del total de los voluntarios extranjeros en las filas rebeldes, son europeos.
Reino Unido, Holanda, Francia y Bélgica son los principales países de los que habrían salido los extranjeros. Se calcula que alrededor de un centenar de ingleses, holandeses, franceses y belgas están luchando contra el régimen. Le siguen Dinamarca, Alemania, Irlanda y Finlandia, de donde habrían salido varias decenas, mientras que de España procederían seis milicianos.
Este informe también analiza los motivos por los que los extranjeros se habrían unido a las filas rebeldes. Señala que aunque los voluntarios no acuden por motivación yihadista cuando entran en contacto con estos movimientos en el país, terminan uniéndose.
Apunta que otros de los motivos por los que se suman a las filas rebeldes son la necesidad de responder a las atrocidades cometidas por el régimen y la falta de apoyo europeo a la revuelta popular.