El informe balístico realizado por la Policía Federal sobre el cuerpo del fiscal Alberto Nisman habría determinado que el disparo se efectuó a una distancia de entre 15 y 20 centímetros, según informa Clarín de fuentes judiciales.
El peritaje se ha incorporado ya al informe que prepara la Policía Federal y del que formará también parte la autopsia al cadáver de Nisman. El dato añadiría aún más incertidumbre a las incógnitas que rodean el caso e inclinaría las pesquisas hacia la hipótesis del asesinato.
La información había sido ya avanzada en los últimos días por el mismo diario, según la cual el orificio de la bala demostraría además que la pistola no llegó a apoyarse en la cabeza de Nisman “lo cual sería absolutamente anormal para un caso de suicido” expresaba este diario. Según fuentes consultadas por Clarín, un proyectil disparado a distancia por un arma de tipo Bersa Calibre 22, la hallada en el domicilio de Nisman, provocaría un efecto mayor sobre el cráneo.El fiscal habría perdido abundante masa encefálica. Tampoco se encontraron restos de pólvora, como es propio en un suicida.
No obstante, la fiscal que investiga la muerte de Nisman, Viviana Fein, ha afirmado que, de acuerdo a los datos de la autopsia, el diaparo se habría efectuado a una distancia no mayor a un centímetro desde el arma encontrada junto al cuerpo, de lo que, según ha informado, «no se infiere la participación de terceras personas» en su muerte.
«El arma fue apoyada sobre la sien. No hay distancia. La autopsia es la única medida de prueba», ha asegurado Fein, en conversación telefónica con el canal Todo Noticias. Según detalló, la bala «atravesó la masa encefálica sin orificio de salida y causó la muerte instantánea según la necropsia».
«En el expediente previo a la autopsia, me informaron que no se infiere la participación de terceras personas por dos causas, en primer lugar por el espasmo cadavérico que presentaba la mano, y por el otro, falta de lesiones traumáticas en el cuerpo de Nisman», continuó la fiscal.