Gobierno de todo el mundo están reaccionado al decreto del presidente de EEUU que, durante lo próximos 30 días, prohibe la entrada en el país a los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana vinculados con el terrorismo.
ALEMANIA. La canciller alemana, Angela Merkel, «está convencida de que la guerra decidida contra el terrorismo no justifica que se coloque bajo sospecha generalizada a personas en función de una determinada procedencia o religión», indicó el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Seibert.
El Ejecutivo de Berlín «estudiará ahora qué consecuencias tienen esas medidas para ciudadanos alemanes con doble nacionalidad», prosiguió el portavoz, según el cual la propia Merkel expresó esa posición ante Trump en la conversación mantenida el sábado por los dos líderes.
El veto a ciudadanos de varios países de mayoría musulmana afectará, según el semanario Der Spiegel, al vicepresidente del grupo de diputados atlantistas del Bundestag (Parlamento federal), de origen iraní, Omig Nouripour. Diputado y miembro de Los Verdes, Nouripour, está entre las decenas de miles de alemanes con doble nacionalidad que, de acuerdo a ese decreto, no podrían viajar temporalmente a Estados Unidos.
GRAN BRETAÑA. El alcalde de Londres, Sadiq Khan, calificó de «vergonzosa» y «cruel» la política migratoria del presidente de EEUU. En una crítica declaración colgada en su cuenta Twitter, Khan, el primer musulmán en llegar a la Alcaldía de la capital británica, dijo que las medidas de Trump perjudican «los valores de libertad y tolerancia sobre los que EEUU ha sido construido».
President Trump’s ban on refugees and immigrants from certain countries is shameful and cruel. https://t.co/ZuMaVoSq8p pic.twitter.com/USOymj8HUO
— Sadiq Khan (@SadiqKhan) 29 de enero de 2017
El primer edil agregó que la nueva política migratoria de EEUU perjudica a británicos que tienen doble nacionalidad con esos países. «EEUU tiene una orgullosa historia de recibir y acoger refugiados. El presidente no puede darle la espalda a esta crisis global, todos los países tienen que asumir su parte», añadió.
«Si bien cada país tiene el derecho de establecer sus propias políticas de inmigración, esta nueva política es contraria a los valores de libertad y tolerancia sobre los que EEUU ha sido construido», prosiguió el alcalde laborista.
Al mismo tiempo, Khan expresa su satisfacción porque la primera ministra británica, Theresa May, también haya indicado que no está de acuerdo con las nuevas medidas del inquilino de la Casa Blanca.
La decisión de Trump «afectará a muchos ciudadanos británicos que tienen doble nacionalidad, incluidos londinenses nacidos en países afectados por la prohibición».
El alcalde subrayó que trabajará con el Gobierno para ayudar a los londinenses que puedan verse afectados por el decreto.
Tras regresar May de Turquía, desde la residencia oficial de Downing Street se informó de que la «premier» no estaba de acuerdo con el veto temporal impuesto por Trump a la entrada de ciudadanos y refugiados de varios países de mayoría musulmana.
Downing Street emitió esa declaración tras haber recibido críticas, incluso desde posiciones conservadoras, por no haber criticado la decisión adoptada por Trump.
En una rueda de prensa en Turquía, May se limitó a decir que la política de inmigración de Washington era competencia de ese país.
«La política de inmigración en Estados Unidos es una cuestión del gobierno de Estados Unidos, igual que la política de inmigración para este país debe ser establecida por nuestro gobierno», dijo un portavoz oficial en la declaración.
«Pero no estamos de acuerdo con este tipo de enfoque y no es el que nosotros vamos a adoptar», agregó.
El ministro británico de Asuntos Exteriores, Boris Johnson, calificó de «divisorio» y «equivocado» el veto impuesto por el presidente de EE.UU., Donald Trump, a la entrada de ciudadanos de varios países musulmanes.
We will protect the rights and freedoms of UK nationals home and abroad. Divisive and wrong to stigmatise because of nationality
— Boris Johnson (@BorisJohnson) 29 de enero de 2017
En su cuenta de Twitter, Johnson criticó la decisión de Trump de «estigmatizar» a la gente de acuerdo a su nacionalidad y recalcó que el Gobierno británico protegerá a sus ciudadanos, muchos de ellos con doble nacionalidad, que estén en el Reino Unido o fuera.
UNIÓN EUROPEA. La alta representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Federica Mogherini, declaró que la UE seguirá celebrando la caída de muros y respaldando a las personas que huyen de la guerra, más allá de su fe o nacionalidad, ante la política migratoria del presidente de EEUU, Donald Trump.
«La Unión Europea seguirá apoyando, dando la bienvenida y ocupándose de aquellos que huyen de la guerra», afirmó Mogherini en su blog, en alusión al veto temporal de Trump a la entrada de ciudadanos de Siria y otros seis países de mayoría musulmana en Estados Unidos.
La jefa de la diplomacia comunitaria aseguró que la UE «continuará trabajando con todos los países de la región y más allá, con un espíritu de total cooperación y respeto». «Y seguiremos celebrando cada muro que se eche abajo y cada nuevo puente que se construya. Seguiremos trabajando por la paz y la coexistencia», subrayó, a la vez que afirmó: «Esta es nuestra historia, ésta es nuestra identidad, nuestro trabajo y nuestro compromiso».
BÉLGICA. El primer ministro belga, Charles Michel, dijo que pedirá explicaciones a Trump, al estar en desacuerdo con el veto a la entrada en el país de ciudadanos de varios países de mayoría musulmana, paralizado temporalmente por una jueza federal.
«Estamos en desacuerdo con la prohibición de acceso al territorio de siete países musulmanes. Bélgica no seguirá el ejemplo y pedirá explicaciones por la vía diplomática», señalaron desde la portavocía del primer ministro a la agencia estatal.
CANADÁ. El Gobierno canadiense anunció que ofrecerá residencia temporal a las personas que han quedado retenidas en Canadá tras la decisión de Estados Unidos de prohibir la entrada a los nacionales de siete países de mayoría musulmana. El ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Ahmed Hussen, anunció la medida durante una rueda de prensa convocada de urgencia.
Hussen también confirmó que la Casa Blanca aclaró a Ottawa que los ciudadanos canadienses con doble nacionalidad y los residentes permanentes en Canadá procedentes de los países afectados no están afectados por la prohibición.
Los funcionarios canadienses revelaron que las autoridades estadounidenses no se percataron de que la orden ejecutivo emitida el viernes por el presidente Donald Trump afectaría a individuos con doble nacionalidad.