En total, se han contabilizado 96 casos, de los que 69 ya han sido confirmados mediante pruebas de laboratorio desde que las autoridades anunciaron el nuevo brote en Mangina, en la provincia de Kivu Norte, el pasado 1 de agosto, el cual se ha extendido ya a la provincia vecina de Ituri. Aquí, se han detectado nueve posibles casos, siete de ellos confirmados, y tres muertos.
Por otra parte, el Ministerio de Salud ha decretado la gratuidad de la atención en las tres zonas sanitarias más golpeadas por la epidemia –Mabalako, Oicha y Beni–, la cual ya es efectiva desde este lunes en los siete centros de salud públicos de la primera de ellas, donde se encuentra Mangina.
Entretanto, la campaña de vacunación iniciada el pasado 8 de agosto en Mabalako, Beni y Mandima continúa. Según ha indicado el Ministerio, casi 1.300 personas han sido vacunadas, 697 de ellas en Mabalako.
Por otra parte, el Ministerio ha anunciado la construcción de un nuevo centro de tratamiento contra el ébola en Makeke, en la zona sanitaria de Mandima, en la provincia de Ituri. Este centro se sumará al que ha instalado Médicos Sin Fronteras (MSF) en Mangina hace una semana.
Según ha explicado el Ministerio, se ha tomado la decisión tras constatar que el centro de MSF, dotado de 50 camas, «se está llenando rápidamente y corre el riesgo de no poder seguir acogiendo a pacientes adicionales visto el rápido aumento de los casos confirmados y sospechosos de los que tiene que hacerse cargo».
Ante la falta de espacio en Mangina, epicentro del brote, y las demandas de la población, se ha optado por instalar el segundo centro en Makeke, una zona limítrofe en la que también hay casos confirmados. Dicho centro será gestionado conjuntamente por el Ministerio de Salud y la ONG International Medical Corps (IMC).