Un alto cargo turco citado por la cadena de televisión norteamericana ABC News ha asegurado que Pompeo pudo escuchar esas grabaciones durante su reciente visita a Turquía, en el marco de las cuales se reunió con las principales autoridades del país, entre ellas el presidente Recep Tayyip Erdogan.
A su regreso de Estambul, Pompeo fue preguntado por esta posibilidad, pero evitó pronunciarse. «No tengo nada que decir al respecto», respondió a las preguntas de los periodistas sobre si había escuchado o no la grabación que atestiguaría lo ocurrido en el consulado.
Una portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, se ha mostrado más tajante y ha aclarado que «el secretario Pompeo ni oyó ninguna cinta ni vio transcripción alguna relacionada con la desaparición de Yamal Jashogi», cuya pista se pierde tras su visita al consulado el 2 de octubre.
En Washington, sin embargo, ya comienza a asumirse públicamente que Jashogi está muerto. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el jueves que «ciertamente eso parece» y avisó de que, si se confirma la implicación de los saudíes, estudiará «consecuencias muy graves» para su aliado.