Las acusaciones contra Venezuela llegan no sólo desde sus círculos más cercanos, sino también del mundo del tráfico de droga. Ha sido el hermano de un excandidato a la alcaldía de la ciudad venezolana de Valencia, considerado como uno de los cinco capos más importantes del mundo, quien ha señalado en repetidas ocasiones las relaciones del gobierno de Venezuela con el tráfico de drogas.
Walid Makled, preso en Venezuela, ya acusó directamente al gobierno de Venezuela de estar involucrado en el narcotráfico hace unos años. Una información que se corroboraría con las declaraciones de Leamsy Salazar, exjefe de seguridad, en las que acusa al número dos de Maduro, Diosdado Cabello, de encabezar una red de narcotráfico.
Según se pudo saber cuando fue detenido, declaró que en el Cartel de los Soles tenía negocios con 15 generales venezolanos y cinco diputados oficialistas, a quienes tenía «en su nómina de un millón de dólares mensuales», informan medios americanos.
Según Makled, altos oficiales del Ejército se encuentran «directamente involucrados en el transporte de droga, por medio de aviones que despegaban diariamente desde el estado Apure, fronterizo con Colombia», según declaró en una entrevista televisiva.
El empresario ha sido acusado tradicionalmente de ser el dueño del cargamento , pero el presunto narcotraficante declaró que eran altos funcionarios del chavismo quienes manejaban la logística de los envíos.
Esta semana se conocía que el exjefe de seguridad de Chávez habría acusado a Diosdado Cabello, número dos de Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, de encabezar El cártel de los Soles. El cártel de los Soles está principalmente compuesto por militares y su nombre origina del emblema que se pone en uniforme venezolano de los generales. Tiene el monopolio del tráfico de droga en el país.