Donetsk, bastión rebelde en el Este de Ucrania, es la próxima plaza que intenta reconquistar el ejecutivo de Kiev. Al menos tres personas han muerto al reanudarse los combates.
Testigos y corresponsales en la zona alertaban esta mañana de un intenso fuego de mortero, castigando posiciones rebeldes en las cercanías de la estación de trenes de la ciudad, donde se encuentra todavía un segundo tren que debe transportar los restos mortales de las víctimas del vuelo MH17 de Malaysia Airlines que fue atacado con un misil el pasado jueves.
Según informan los rebeldes, varios proyectiles cayeron en viviendas de la zona occidental de la ciudad, lo que ha obligado a muchos de sus inquilinos a resguardarse en los refugios subterráneos habilitados por las autoridades locales.
Los combates entre las fuerzas de Kiev y los prorrusos de la autoproclamada República Popular de Donetsk se han reanudado en medio de la crisis provocada por el derribo del avión, en el que murieron 298 personas.
Los separatistas prorrusos han afirmado a Reuters que se trata de un intento por parte del Ejército de Kiev para entrar en Donetsk, ciudad en control de los rebeldes desde abril.
El Ayuntamiento de Donetsk ha pedido en un comunicado a los residentes de la zona en la que el avión fue derribado que se queden en sus casas. Hay fuego de artillería y grandes columnas de humo en el área.
Del lado ucraniano, un portavoz del Ejército señaló que las operaciones militares para recuperar el control de la zona separatista están en «una fase activa», si bien declinó comentar las informaciones sobre movimientos de tanques en Donetsk.
Residentes de la zona han comentado a Reuters que ha habido explosiones durante toda la mañana y que la población está muy preocupada.
Am in Donetsk station, passengers being evacuated. Lots of separatist present, heavily armed pic.twitter.com/4w0MszjYP6
— rudy bouma (@rudybouma) julio 21, 2014
Tanks & APCs fighting in serious battle at #Donetsk train station as locals take shelter from shelling @Richardgalpin pic.twitter.com/KOGY532GSM
— Alec Luhn (@ASLuhn) July 21, 2014
Ahora en el aeropuerto de #Donetsk pic.twitter.com/MsxbfvPvAF
— Francisco Guaita (@Guaitafran) July 21, 2014
Kiev niega haber atacado Donetsk, sí los alrededores
El Gobierno ucraniano ha asegurado que no tiene nada que ver con las explosiones que han ocurrido este lunes en la ciudad de Donetsk.
«Hay en marcha una limpieza en los alrededores de la ciudad para la destrucción de los controles de los terroristas. Si hay explosiones en el centro de la ciudad no se deben a militares ucranianos«, ha afirmado el porvazos del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa ucraniano, Andrii Lisenko.
«Tenemos orden estricta de no utilizar la aviación ni la artilería en la ciudad. Si hay combates en la ciudad podría deberse a un enfrentamiento de un grupo que se está enfrentando a los terroristas», ha añadido Lisenko.
Poroshenko ordena alto el fuego en el lugar de la caída del avión
El presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, ordenó este lunes un alto de fuego en un radio de 40 kilómetros alrededor del lugar donde fue presuntamente derribado hace cuatro días el Boeing 777 malasio con 298 personas. Esta medida no incluye a Donetsk, que se encuentra a 70 kilómetros del lugar del siniestro.
«He dado la orden: los militares ucranianos no deben emprender operaciones ni abrir fuego en un radio de 40 kilómetros alrededor del lugar de la tragedia», cuyo epicentro se encuentra junto a la localidad de Grábovo, en la región oriental de Donetsk, dijo el mandatario ucraniano a los periodistas.
Forenses holandeses examinan los cadáveres
Un grupo de especialistas forenses holandeses llegó este lunes a la localidad de Torez, en la región ucraniana de Donetsk, donde está el tren frigorífico en el que se han depositado la mayoría de los cadáveres de los pasajeros del avión malasio.
Los tres especialistas holandeses abrieron los vagones para examinar los cuerpos en presencia de la misión de la OSCE en Ucrania encabezada por el suizo Alex Hug, según informaron testigos.
Ahora negocian con los rebeldes prorrusos el traslado del tren a la ciudad de Járkov, la más importante del este de Ucrania, donde se procedería a su identificación y serían visitados por los familiares de las 298 víctimas de la catástrofe.
Los separatistas, que se niegan a colaborar con las autoridades de Kiev, informaron el domingo de que el tren permanecería estacionado en Torez hasta la llegada de expertos internacionales.
Según testigos, el médico holandés Peter Van Vilet expresó su satisfacción por el estado de conservación de los cuerpos, que se encuentran a cero grados dentro de unos vagones herméticamente cerrados.
Los cuerpos fueron refrigerados en la madrugada del domingo, más de 48 horas después del accidente, tras permanecer envueltos en sacos en las inmediaciones de la zona de la catástrofe, en la aldea de Grabovo.
El primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, informó de que los servicios de rescate han encontrado ya 271 cuerpos, de los que 251 se encuentran en los vagones en Torez.
Los holandeses acompañados por representantes de la OSCE se desplazarán ahora a la zona cero de la catástrofe, donde los socorristas siguen buscando los restantes cadáveres y otras evidencias que ayuden a esclarecer las causas tragedia.
Algunas partes del Boeing-777, como es el caso de la nariz del aparato, se encuentran a varios kilómetros de Grabovo, en la localidad de Rasípnoye, en medio de un campo de girasoles.
30 milicianos capturados
Las fuerzas gubernamentales capturaron a cerca de 30 milicianos prorrusos junto a la ciudad de Lisichansk, en el este de Ucrania, informó hoy el mando de las tropas que participan en las operaciones contra los separatistas.
«Como resultado de los choques armados fueron destruidos vehículos del enemigo, que sufrió bajas mortales. Cerca de treinta hombres fueron capturados», se afirma en un parte publicado en la página oficial del mando ucraniano en Facebook.
El comunicado añade que en el curso las últimas veinticuatro horas las tropas ucranianas consiguieron bloquearon parcialmente Lisichansk, ciudad de unos 100.000 habitantes, y que los guerrilleros separatistas intentaron en varias ocasiones romper el cerco.