«Hemos investigado 16.000 casos penales por desertores que han dejado la zona de operaciones militares y una parte significativa de ellos lo han hecho con armas», ha asegurado Anatoli Martos, el fiscal militar jefe de Ucrania, en declaraciones a la prensa.
El Ministerio del Interior ucraniano ha abierto las investigaciones correspondientes para encontrar a todos los militares que han desertado pero, en 2014, no logró encontrar a más de un millar de ellos.
El coronel Alexander Pravdivets, jefe del Departamento de Movilización de las Fuerzas Armadas ucranianas, ha informado de que en la última oleada de reclutamiento, en la que se incorporaron unos 27.000 reclutas, en torno al 50 por ciento de los militares dejaron el servicio.