Así, han dejado claro que «el Consejo comprende que los ataques aéreos» de Estados Unidos, Francia y Reino Unido contra instalaciones de armas químicas en Siria constituyen «medidas específicas» cuyo «único objetivo es prevenir el uso ulterior de armas químicas» por «el régimen sirio para matar a su propio pueblo».
«El Consejo apoya todos los esfuerzos dirigidos a la prevención del uso de armas químicas», han recalcado los Veintiocho en el texto de conclusiones aprobado sobre Siria tras el último ataque químico en Duma el pasado 7 de abril, que dejó entre 50 y 70 muertos y al que Estados Unidos, Francia y Reino Unido respondieron el sábado de madrugada con un ataque coordinado conjunto contra tres instalaciones militares vinculadas al programa de armas químicas de Damasco.