La empresa Harmony Gold, que gestiona la mina, ha confirmado que los cinco mineros que quedaron atrapados en el derrumbe, provocado por un temblor, fallecieron en el suceso.
En su comunicado, la compañía ha expresado sus condolencias a los familiares de las víctimas, asegurando que el suceso será investigado.
El suceso tuvo lugar en la mina de Kusasalethu, ubicada a unos 80 kilómetros de Johannesburgo. Sudáfrica cuenta con numerosas minas para la explotación de sus vastos recursos naturales y los accidentes laborales en las mismas son relativamente frecuentes.