«El policía que fue trasladado al Hospital de Distrito de Salisbury ha sido sometido a pruebas y no necesita ningún tratamiento. No ha sido envenenado con un agente nervioso y ha abandonado ya el hospital», ha explicado un portavoz del hospital citado por el diario ‘The Guardian’.
El agente acudió al Hospital Great Western el sábado para pedir asesoramiento médico y fue trasladado al Hospital del Distrito de Salisbury, un centro la capacidad para realizar las pruebas especializadas adecuadas.
El policía detectó los síntomas sospechosos muy cerca de donde fueron expuestos Dawn Sturgess y Charlie Rowley el pasado sábado, hospitalizados tras resultar afectados por la misma sustancia empleada en marzo contra el exespía ruso Sergei Skripal y su hija Yulia.
La Policía continúa buscando el origen de esta contaminación porque sospecha que estas personas han resultado afectadas tras entrar en contacto con la sustancia utilizada contra los Skripal. Se sabe que Rowley rebuscaba en la basura y recogía colillas del suelo.
Londres ha acusado a Rusia de estos casos, pero Moscú lo niega y reprocha a las autoridades británicas que no le haya permitido colaborar en la investigación.