«Hablé con el fiscal especial Mueller, que me entrevistó, me pidió una entrevista. Yo cooperé», ha afirmado Pompeo durante su comparecencia, previa a una votación en la que se decidirá si finalmente es confirmado como sustituto de Rex Tillerson al frente del Departamento de Estado.
Pompeo, no obstante, ha rehusado dar detalles de su conversación ni ha aclarado cuándo tuvo lugar –según ‘The Washington Post’, ocurrió en marzo–. Tampoco ha revelado las «conversaciones privadas» que haya podido mantener con el presidente, Donald Trump, si bien ha tachado de «falsas» las alusiones a una supuesta presión.
Trump ha cargado en reiteradas ocasiones contra Mueller y su «caza de brujas». En un tuit publicado este jueves, el presidente ha negado sin embargo que vaya a apartarlo de las investigaciones: «Si hubiese querido despedir a Robert Mueller en diciembre, como ha informado el fracaso ‘New York Times’, lo habría hecho».
El mandatario también ha utilizado las redes sociales para desearle «buena suerte» a Pompeo de cara a su comparecencia ante el Senado y ha subrayado que el actual director de la CIA «será un gran secretario de Estado».