«Estoy horrorizada con el asalto deliberado del Gobierno sirio sobre Homs y su uso de artillería y armamento pesado en lo que parecen ser ataques indiscriminados contra zonas civiles de la ciudad», ha señalado en un comunicado.
En su opinión, «la incapacidad del Consejo de Seguridad (de la ONU) para acordar una acción colectiva firme parece haber avivado la disposición del Gobierno sirio a masacrar a su propio pueblo en su esfuerzo por aplastar la disidencia».
En este sentido, la alta comisionada ha subrayado que es «extremadamente urgente» que «la comunidad internacional vaya al grano políticamente y adopte una acción efectiva para proteger a la población siria».
Por otra parte, Pillay ha expresado su temor por el hecho de que además de continuar los «abusos generalizados a los Derechos Humanos», en los últimos meses en Siria «la situación humanitaria se ha deteriorado significativamente en muchas partes del país, especialmente en Homs».
Desde que comenzaron las protestas contra el régimen de Bashar al Assad a mediados de marzo de 2011, «miles de manifestantes sirios y civiles han muerto, han sido heridos, detenidos, torturados y sometidos a desapariciones forzosas», ha denunciado la responsable de la ONU, haciendo hincapié en que «todas las pruebas apuntan a la implicación del Ejército sirio y las fuerzas de seguridad en la comisión de la mayoría de estos delitos».
«Teniendo en cuenta su naturaleza y escala, podrían constituir crímenes contra la Humanidad, punibles bajo el Derecho Internacional», ha recordado Pillay, que ha advertido a los dirigentes sirios de que «habrá un esfuerzo sostenido, dure lo que dure, para hacer justicia a aquellos que han sido víctimas de los graves y sistemáticos delitos que se están produciendo actualmente en Siria».
RESPONSABILIDAD DE INTERVENIR
Por último, ha recordado que en 2005, los dirigentes mundiales acordaron «por unanimidad» que cada país es responsable de proteger a su población de los crímenes contra la Humanidad y que cuando un estado no cumple con esta promesa «la comunidad internacional en su conjunto tiene la responsabilidad de intervenir adoptando una acción proactiva».
«La virtual carta blanca que se está dando ahora al Gobierno sirio traiciona el espíritu y la palabra de esta decisión unánime y está privando a la población de la protección que con tanta urgencia necesita», ha remachado la alta comisionada.